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Colombia se suma al grupo de países que tienen que idear y tomar las medidas más oportunas para disminuir el alcance y propagación del coronavirus, intentando, en la medida de lo posible, que no tenga un gran impacto en la economía del país
La presidencia de la República de Colombia decretaría el inicio de la cuarentena obligatoria el 24 de marzo, con intención de volver a la normalidad el 13 de abril, una fecha que finalmente no dio por concluida la situación de excepción.
La situación actual de crecimiento en la curva que representa el aumento de contagios ha obligado a aumentar el tiempo de distanciamiento social con nuevas medidas, más allá de la cuarentena obligada en un principio.
Las obligaciones del ciudadano colombiano en estado de alarma sanitaria
El presidente Iván Duque decretó, junto a sus 18 ministros, el Aislamiento Preventivo Obligatorio de todos los habitantes de la República Colombiana con el objetivo de enfrentar la actual pandemia del Coronavirus y reducir el riesgo en la escalada de contagios.
En este sentido, en el decreto se obliga al cumplimiento de la limitación en la libre circulación de vehículos y personas por todo el territorio colombiano. En base a este principio, se han redactado un total de 34 excepciones que tienen como objetivo garantizar a todos los ciudadanos el derecho a la vida, a la salud y a la supervivencia.
Por estas razones, los siguientes son los casos en los sí es posible la circulación y que deben conocer todos los ciudadanos colombianos.
La asistencia a la vida
El poder atender y prestar servicios de salud y conseguir los bienes de primera necesidad, como alimentos, medicamentos, bebidas… se podrá seguir realizando tomando las debidas precauciones de distanciamiento social, que se deben cumplir en cualquiera de las excepciones promulgadas.
Misiones médicas
Los trabajos que realice la OPS (Organización Panamericana de la Salud) y demás organismos internacionales que estén operando en suelo colombiano, así como el resto de servicios relacionados con actividades de emergencias, lo que incluye las acciones veterinarias.
El sistema productivo de salud
La fabricación, el abastecimiento, almacenamiento, transporte, comercialización y distribución de las medicinas y productos farmacéuticos, así como productos de limpieza y aseo, tanto personal como para las instalaciones e infraestructuras.
Seguridad
Así mismo, se permite la libre circulación de los servidores públicos, contratistas del estado necesarios para la lucha contra la pandemia, fuerzas militares, Policía Nacional y el resto de organismos pertenecientes a la seguridad del estado colombiano. Igual suerte correrán los servicios de vigilancia y seguridad privada, funcionarios de cárceles y el sector profesional necesario para el correcto mantenimiento de los servicios públicos de alcantarillado, acueducto, alumbrado público, energía eléctrica y aseo.
Otros servicios
Otros servicios también aprobados dentro de la excepción de prohibición son aquellos que permiten los desplazamientos a servicios bancarios y notariales, así como la asistencia y cuidado a personas mayores de 70 años, niños, niñas y adolescentes, y sobre todo a personas con discapacidad y enfermos con tratamientos especiales necesitados de la asistencia de personal capacitado.
Nuevas medidas aprobadas
Tras la insuficiente respuesta de estas medidas, el presidente de la República proclamó nuevas medidas de carácter urgente, como el cierre de fronteras con Venezuela y condiciones para aquellos extranjeros que provienen de Asia y Europa. Así mismo, se prohíben las concentraciones de más de 50 personas en cualquier tipo de evento.
Al turismo y a la aviación, dos de las grandes perdedoras por la crisis, se les abre una línea de crédito por valor de 250.000 millones, beneficios fiscales, reducción de aranceles y la ampliación de los plazos para declarar y pagar liquidaciones.
Las prioridades de Colombia
Independientemente a la lealtad de Duque a Alvaro Uribe, la salvación nacional debe dar prioridad a los asuntos de estado y a su población y, en este sentido, se deben entender tres vías que rebajen el nivel de catástrofe sanitaria y económica que tiene que afrontar el país.
En primer lugar, debido a las circunstancias de confinamiento, se hace imprescindible y urgente atender a las personas con menos ingresos, tanto independientes como de aquellos que dependen del rebusque diario para la supervivencia.
En relación a la salud, el Gobierno está tratando de conseguir aumentar los recursos con 14.000 millones del presupuesto que irán destinados a la atención a los enfermos.
En segundo lugar, se debe apostar por una aceleración de la recuperación económica en cuanto el estado de alarma lo permita. En este sentido, se prevé un aumento espectacular del endeudamiento, sobre todo en el mercado interno, lo que llevará la deuda de la actual participación del 55 % del Producto Interior Bruto al 60 %, como mínimo.
Por lo tanto, la política monetaria y fiscal van a tener que actuar con prontitud y eficacia, con una acción clave, la de aumentar el gasto público.