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El pasado 6 de julio el Foro Económico Mundial expidió el “Informe Global de Tecnología de la Información 2016”. Este da a conocer los beneficios e impactos económicos y sociales de las inversiones en tecnologías de la información y muestra los resultados de índice NRI (Networked Readiness Index), que mide la conectividad de los países.
Entre un grupo de 139 países, Colombia ocupa hoy el puesto 68, se encuentra cuatro puestos más atrás que el año anterior, con la salvedad de que mantiene la misma puntuación que el año anterior, pero a causa de la mejora de otros países fue reubicado.
El informe revela que la adopción de tecnologías de la información por parte de la población en Colombia sigue aumentando a un ritmo acelerado, sin embargo, este ritmo no ha estado acompañado por la misma tendencia por parte de empresas y gobierno.
En cuanto a las empresas, el informe explica que el uso de las TIC para operaciones B2B (business to business) y B2C (business to customers), así como la creación de nuevos modelos de negocio estuvo estancada en los últimos años y, en lo que respecta al gobierno señala como principales factores de debilidad la baja eficacia de los órganos legislativos, la ineficiencia del sistema judicial y la tasa desproporcionada de impuestos (1).
Los pilares en los que se fundamenta el informe indican que se requiere en promedio 1288 días para hacer cumplir un contrato, lo que nos posiciona en el puesto 133 en lo referente a la eficiencia de la justicia y en el pilar de las tasas impositivas Colombia se encuentra entre las 10 más altas de la muestra.
En los últimos años el país ha venido construyendo política pública y desarrollándola a través del Plan Vive Digital, vigente desde el 2010, pero en este momento coyuntural en el que el mundo enfrenta la cuarta revolución industrial, se deben redoblar esfuerzos en varios frentes para avanzar en el índice de conectividad y por esta razón es importante evaluar este resultado y apropiar las reflexiones y conclusiones que da el informe, tanto a nivel empresarial como a nivel gubernamental.
Por más de que los pronunciamientos y recomendaciones expedidas por la Comisión Europea en materia de tecnologías de la información y comunicación no nos obliguen, no podemos ser sordos ante sus experiencias, y deberíamos guiar nuestros pasos en reglamentación y legislación apropiando su conocimiento.
En este sentido, el informe expresa que el índice refleja una fuerte correlación entre conectividad y renta per cápita, lo que nos deja ver claramente que un país conectado, aumentará la calidad de vida de los ciudadanos y más importante aún, de cara al futuro, creará las condiciones propicias para el desarrollo de habilidades que ciudadanos y empresas requieren para asumir un rol activo dentro de la cuarta revolución industrial.
En segundo lugar, cabe resaltar que siete 7 de los 10 primeros países del índice son europeos. Esto es algo que deberíamos tener en cuenta –ya lo habíamos mencionado en el artículo anterior de este blog-, porque por más de que los pronunciamientos y recomendaciones expedidas por la Comisión Europea en materia de tecnologías de la información y comunicación no nos obliguen, no podemos ser sordos ante sus experiencias, y deberíamos guiar nuestros pasos en reglamentación y legislación apropiando su conocimiento.
Por último, en lo que se refiere a la cuarta revolución industrial y a las tendencias en la adopción de TIC, el informe reconoce que la nueva revolución se nutre de otro tipo de innovación; la innovación que nace de las tecnologías digitales creando nuevos modelos de negocio. A pesar de que hay una disminución en la cantidad de patentes aprobadas, hay un aumento en la variedad de modelos de negocio nacidos de la digitalización.
Lo anterior pone en el centro de atención directamente a los gobiernos y su reglamentación y en nuestra opinión, nos indica claramente que oprimir, prohibir o dificultar la ejecución de nuevos modelos de negocio con base en la protección de modelos normativos tradicionales, no es la vía para traer beneficios e impactos económicos y sociales a partir de las introducción de tecnologías de la información.
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(1) Página 28, The Global Information Technology Report. Foro Económico Mundial, 2016.
