Por: Nahun Frett, MBA, CIA, CCSA, CRMA, CPA, CFE

 

La auto-evaluación de control es una forma para ayudar a la organización a incrementar su habilidad para alcanzar los objetivos de negocio.  La mayor parte del tiempo, esto se hace a través de una serie de talleres o reuniones facilitadas por el departamento de auditoría o finanzas.  Estos talleres pueden ser aplicados a proyectos, procesos, unidades de negocio, funciones, o básicamente cualquier nivel, cuyos objetivos puedan ser claramente definidos. Estos talleres envuelven al personal directamente responsable del logro de objetivo organizacional, diseñados para examinar, evaluar y reportar la probabilidad de que los objetivos sean alcanzados.

 

De acuerdo al libro Control Self-assessment: Making the Choice de Glenda S. Jordan, CIA, CPA, CFE, los principales beneficios del CSA son:

 

1.    Ayuda a los empleados de línea de todos los niveles a entender y asumir su responsabilidad y cumplimiento del efectivo control y riesgo gerencial.

 

2.    Las acciones correctivas pueden ser más efectivas, debido a que los participantes “son dueños” de los resultados.

 

3.    Provee una cobertura amplia de asuntos importantes, debido a que los expertos, el equipo de trabajo, pueden rápidamente enfocar los riesgos y controles claves.

 

4.    Mejora la comunicación en todos los niveles, debido a que los talleres pueden incluir múltiples lugares, departamentos, funciones y niveles de personal.

 

5.    Enseña a los participantes cómo analizar y reportar sobre control interno, así ayuda a incrementar la conciencia de control en la organización entera.

 

6.    Incrementa la preocupación de los objetivos organizacionales y el rol del personal en el logro de las metas y objetivos.

 

7.    Motiva al personal para el diseño e implementación cuidadosa de procesos de control y mejoramiento continuo de los controles operativos.

 

8.    Ayuda a la auditoría a focalizar solamente los puntos de alto riesgo y concentrar los esfuerzos de auditoría en éstos.

 

9.    Provee evaluación sobre controles suaves o colaborativos que son difíciles de analizar por la auditoría tradicional.

 

10. Incrementa la participación de la gerencia en las tareas de mejorar el ambiente de control interno.