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Por: Marta Cadavid. CIE AF, CAMS, CFE, AML 

Es bien sabido que los canales de denuncias actualmente son el mejor mecanismo para prevenir y detectar fraudes. Solo con ojear diversos reportes publicados por instituciones como ACFE nos indican que incluso los mecanismos de reporte arrojan mejores resultados que otras estrategias más convencionales a la hora de intervenir fraudes.

A pesar de que las estadísticas son contundentes, esto no significa necesariamente que sea la última palabra en cuanto a recursos para administrar riesgos. Es decir, las encuestas recogen información de lo que la mayoría de las personas y organizaciones están usando o está de moda para determinar las tendencias, dejando por fuera nuevos recursos y metodologías que incluso pueden ser más eficientes pero que están en etapas tempranas de comercialización y conocimiento por el público generando por lo tanto sesgos en los tomadores de decisiones.

Tradicionalmente, los canales de denuncias o líneas éticas funcionan o se activan por la valentía de un pequeño grupo de personas que un día deciden comunicar aquellos actos que atacan las organizaciones. Aunque es un acto loable, no es suficiente, ya que se está trasladando a terceros la forma de encontrar lo que deteriora a la organización. Como ejemplo, suponga que la forma de usted cuidar su familia y patrimonio depende de sus vecinos, de la alarma comunitaria o de alguien que le avise cuando el amigo de lo ajeno llegará a su casa y así actuar o tomar medidas más eficientes.

Los mecanismos de denuncias hacen parte de las tantas medidas que una organización debe implementar para intervenir los actos deshonestos o iniciar investigaciones, pero se debe abrir el camino y la mente a otros desarrollos menos convencionales y más eficientes. La transformación digital con avances en inteligencia artificial ofrece una variedad interesante de herramientas que bien implementadas ofrecen a las organizaciones ahorros en tiempo y dinero usando la riqueza informativa que la misma corporación produce y controla.

La modernización va más allá de tener mecanismos sofisticados para líneas de producción, ya que la administración de riesgos también está haciendo historia con aquellos que buscan en la innovación la estrategia para predecir, prevenir y detectar actos deshonestos.  Para continuar con el ejemplo de la seguridad de su hogar, además de contar con su vecino como mecanismo de alerta, usted puede adquirir un sistema de monitoreo con sensores que vigile el exterior e interior de su casa, le envíe alertas a su correo electrónico y celular, y cuyo control depende 100% de usted. Algunas personas le dirán que usted está totalmente equivocado porque la alarma comunitaria es lo más conocido y lo más usado, pero usted está seguro que la modernización también cabe en su hogar.  ¿Nota la diferencia del impacto de la modernización de la administración de riesgos?

Es fundamental romper los esquemas, salir de la caja y pensar lo impensable para romper con paradigmas que nos están llenando de redundancia laboral.  Es realmente importante buscar más allá de lo tradicional y verificar si efectivamente lo que estamos haciendo es lo único que hay. Continuar en la fila de lo que el resto de las personas hacen conlleva a ser parte del mismo esquema que tiende a la obsolescencia; cuando la industria criminal, el abusador organizacional y el perpetrador siempre están en constante búsqueda de lo novedoso, de la creatividad, de las tendencias, de cómo entrar y actuar en las organizaciones camuflados a veces en las buenas intenciones. ¿Nota de nuevo la diferencia del impacto de la modernización de la administración de riesgos?

Recuerde que usted puede explorar otros sabores aun cuando el resto de sus colegas estén comiendo siempre lo mismo.

 

Marta Cadavid, Equipo NOFRAUD.

Colaboradores de Auditool

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