CP Felipe Alberto Pérez Hernández. Colaborador de Auditool

Para entender el concepto de estrategia empresarial es preciso referirse a la misión, visión y a los valores de una organización como conceptos fundamentales para definir una estrategia exitosa. En tal virtud, para el desarrollo de esta, es necesario tener claro cuál es la misión, de la compañía, así como los valores que guiaran sus acciones y sus objetivos, tal como se detalla a continuación:

Fases de la estrategia empresarial

La estrategia empresarial es un proceso que comprende diferentes fases y puede representarse gráficamente como lo indica la gráfica que se presenta a continuación:

1. Definición de los objetivos estratégicos de la compañía

Los objetivos estratégicos son establecidos por una compañía a partir de su misión y sus valores, con el fin de alcanzar su visión. Representan la meta desarrollada a nivel estratégico a la que una organización espera llegar en el mediano o largo plazo, normalmente entre 2 y 5 años.

Para ser eficaces, deben tener las siguientes características:

Para definir los objetivos estratégicos y desarrollar las estrategias para conseguirlos, se debe realizar un análisis profundo de su contexto interno y externo que le permita identificar, recopilar y analizar información relevante para este proceso.

2. Desarrollo e implementación de la estrategia de la compañía

Una vez definidos los objetivos estratégicos se deben convertir en acciones reales, por lo que se desarrolla el plan estratégico que los incluye, de forma escalada, a lo largo de los distintos niveles de la compañía. La imagen que se presenta enseguida representa ilustra los distintos niveles que se explicarán a continuación:

Teniendo en cuenta las características de cada negocio o su estructura organizativa, algunos niveles no serán susceptibles de aplicarse por lo que no todos los niveles deben estar presentes en todas las compañías.

3. Monitorización y adaptación de la estrategia

Para monitorizar la evolución de le estrategia corporativa, hay que definir y aplicar un adecuado sistema de control que permita dar seguimiento a dos aspectos:

En esta fase, se recomienda igualmente, siempre y cuando la capacidad o volumen de negocios lo permita, la creación de una oficina de gestión de la estrategia que contribuya a gestionar la brecha entre la ambición y el desempeño obtenido.

Gestión de riesgos empresariales

Uno de los principales marcos vigentes para la gestión y control interno de los riesgos es COSO ERM 2017.

Este marco permite, entre otros aspectos, obtener una mayor compresión del valor de la gestión del riesgo empresarial al definir y llevar a cabo la estrategia. También, mejora la alineación entre el desempeño de actividades y la gestión del riesgo empresarial para perfeccionar la definición de objetivos de desempeño y el mejor entendimiento del impacto que el riesgo pueda tener en estos.

Se resume en un conjunto de 20 principios organizados en torno a cinco componentes interrelacionados. La adhesión a estos principios puede proporcionar a la alta dirección y a la Junta Directiva, una expectativa razonable de que la compañía entiende y se esfuerza por gestionar los riesgos asociados con su estrategia y sus objetivos.

Dada la importancia de este marco como referencia internacionalmente reconocida, se recomienda, como buena práctica, la incorporación y utilización de la metodología COSO ERM 2017 en los enfoques de Auditoria interna que se desarrollan para la estrategia de negocio.

El rol de la auditoría interna en la estrategia del negocio

Dada su formación y experiencia en identificación de riesgos y controles, y teniendo en cuenta la visión global de la compañía con la que normalmente cuenta, el auditor interno puede aportar un importante valor agregado a los órganos de gobierno y a la alta dirección, con relación al sistema de gobierno y de control de los riesgos al proceso de definición, implantación y supervisión de la estrategia de la entidad.

Podemos observar el rol del auditor interno en el proceso estratégico de negocio desde dos puntos de vista complementarios:

Independientemente de cuál de estos dos roles asuma la Auditoría Interna siempre resultara clave una comunicación bidireccional fluida con los órganos de gobierno y la alta dirección.

Por último, es esencial la adopción y aplicación de las medidas de salvaguarda de la independencia de la actividad de la Auditoría interna, según lo establecido en el grupo de Normas del epígrafe 1100 del Marco Internacional para la Práctica de la Auditoria Interna (MIPPAI).

 

(1) Basado en el documento Auditoría Interna en la estrategia de negocio, LA FÁBRICA DE PENSAMIENTO, Instituto de Auditores Internos de España, marzo 2021.

 

CP Felipe Alberto Pérez Hernández. Colaborador de Auditool

Contador Público U. Central, cursó Especialización en Ciencias Tributarias, su experiencia profesional de más de 25 años va desde una gran multinacional pasando por una firma de auditoría hasta llegar al sector petrolero en el que ha trabajado para operadores y en auditorías externas. Desde hace varios años se desempeña como Revisor Fiscal en varias instituciones sin ánimo de lucro y como consultor empresarial independiente.