“Los economistas piensan sobre lo que la gente debería hacer. Los psicólogos observan lo que realmente hacen”.
Daniel Kahneman.
El psicólogo Daniel Kahneman recibió, sin ser economista, el Premio Nobel de Economía en el 2002, por sus investigaciones y por su libro revelador que ilustró el funcionamiento de la mente de las personas y su toma de decisiones, especialmente en entornos de incertidumbre.
Desde la economía se declara el potencial agrícola que tiene Colombia, para lograr el liderazgo en la proveeduría de alimentos para el mundo. Existen muchos estudios sobre la capacidad arrolladora que tiene el agro para jalonar la economía nacional a crecimientos del 5 % y hasta 10 %, pero desde la psicología se debe reconocer la importancia de concentrar el trabajo en las personas, en esos empresarios del campo quienes, según sus unidades productivas, son el 80% pequeños y medianos productores.
Llegó la hora de concentrarnos en lo que queremos y podemos hacer, atendiendo los planes y las aptitudes de los productores del campo, para lograr con cada uno no solo la producción de su cultivo con las mejores prácticas sino también la activación de su ser empresarial.
Hoy no es suficiente alcanzar buenas cosechas en la puerta de la finca, hecho que ya logramos gracias al trabajo que realizamos en campo revolucionando el manejo agronómico de los cultivos, así como a las prácticas sostenibles con el uso de las tecnologías de protección y nutrición de cultivos. Falta superar otra realidad del productor: hoy solo recibe el 15 % del precio final que pagamos los consumidores finales. Por ejemplo, por el mango por el que pagamos $3.100 o $3.500 en el supermercado, solo le representa al agricultor $500.
Por lo anterior, el trabajo que marcará diferencia y transformará esta realidad es aquel que, además de transformar las prácticas productivas en las fincas para lograr cosechas maravillosas, active el ser empresarial que en su interior tiene el productor del campo. Por tal razón, Procultivos ANDI con su modelo de Manejo Agronómico Disruptivo ya integra a los componentes productivos de las cosechas, el desarrollo del ser empresarial y, de paso, aplica las bondades de la economía solidaria en la actividad comercial de los productores.
Debemos lograr que el potencial agrícola se cumpla de acuerdo con los estudios económicos, así como materializar las acciones que activen el ser empresarial interior de los agricultores. Hay mucho por hacer y es con y por la gente del campo que lo lograremos.
Un abrazo.