Hace algún tiempo, tuve la oportunidad de asistir a una charla de Bob Proctor, uno de los practicantes y promotores de la Ley de la Atracción, también conocida como ‘The Secret’.  Su intervención resultó para mí muy enriquecedora, por la elocuencia de Proctor como conferencista y la simplicidad de su ecuación para lograr lo que se quiere en la vida. 

En esta ocasión, les voy a mostrar una ecuación diferente a la suya, una ecuación que a mí me ha funcionando en todo lo que he logrado tanto con otros, como conmigo.

Cuando de hablar de individuos, equipos u organizaciones de alto desempeño se trata, estoy convencido, y lo he evidenciado en diversos contextos en los que he realizado coaching o entrenamientos, que todo comienza por el diseño y planeación de los resultados deseados y se cristaliza cuando el sistema de creencias individual u organizacional facilita estos logros.

En cuanto al diseño y planeación de resultados deseados, y de acuerdo con la Programación Neuro Lingüística, el primer paso es saber qué se quiere, qué se desea, y en esta fase es importante que el dueño de estos deseos sepa que TODO es posible. 

El segundo paso es traerlo al presente, y al traerlo al presente, y esto tiene un poder especial debido a que la mente, al estar trayendo algo al presente, se encargará de vivir el resultado deseado por primera vez. 

La forma más poderosa de lograr esto es mediante el uso de los cinco sentidos.  Vista, oído, tacto, olfato y gusto.  En este punto estoy muy de acuerdo con las técnicas que hablan de escribir o representar gráficamente los resultados deseados. 

Esto facilita que los individuos que buscan el alto desempeño hagan más presente y tengan evidencia durante la ejecución del resultado deseado.  Se puede decir que hasta la piel misma siente lo que se está logrando.

Luego de esto, y teniendo en cuenta el dónde estamos (en el resultado deseado) la mente tiene la habilidad de crear un contraste entre este resultado deseado y el estado actual.  Para esto, siempre he sugerido evidenciar cómo se encuentra el individuo o el equipo respecto a ese resultado deseado.

Este contraste es la mejor y más rápida forma de crear un plan de acción o ejecución, sabiendo que la ejecución es un elemento importante de esta ecuación: Cómo ESTOY, multiplicado por lo que HAGO es igual a lo que OBTENGO.

Esta ecuación permite fácilmente ver que todo lo que se obtiene es el resultado de lo que se hace, multiplicado por cómo se está.  Es decir, si al hacer multiplico lo que HAGO por un ESTADO de temor, zozobra, duda, tristeza, dolor y demás estados que los seres humanos consideramos negativos, el resultado de esta multiplicación, llamado en la misma lo que OBTENGO, será negativo. 

Si por el contrario, este ESTADOes lo que la gente llama positivo, como por ejemplo, alegría, certeza, fe, agrado, placer, seguridad, tranquilidad y demás, el resultado será positivo en el estricto sentido matemático.  Es decir, matemáticamente se puede decir que siempre que como ESTOY y lo que HAGO sean mayores que cero, el resultado, es decir lo que OBTENGO, será positivo.

Vale la pena hacer un gran paréntesis para decir que la variable HAGO siempre es mayor o igual a cero, pues nunca se podrá hacer en negativo.  Las acciones siempre sumarán a las buenas intensiones, por más erróneas que estas sean.  Aprovecho para comentar que en PNL presuponemos la existencia de una intensión positiva en toda acción y los errores simplemente realimentan el sistema.

Si la variable es NO HAGO, su valor es igual a cero entonces lo que obtengo será CERO. 

Cualquier variable multiplicada por cero da como resultado CERO.  Y acá tenemos una de las principales causas por las cuales los pensadores positivos (diferentes a los pensadores-ejecutores) rara vez obtienen resultados cuando se sientan a esperar que todo lo que piden, visualizan, desean con todo su cuerpo y alma les llegue. 

En cuanto a la variable ESTOY, esta puede ser negativa, positiva o igual a cero y es en últimas la que define si lo que se obtiene es positivo o negativo.  Y aprovecho para recordarles que yo soy de los que piensa que detrás de lo que se obtiene, negativo o positivo, siempre la intensión es ganar y se logra continuamente como parte de nuestra ilimitada inteligencia. 

Esta ecuación es poderosa porque nos permite ser muy específicos en el efecto de cómo estamos como parte importante de lo que causa que nuestras acciones a veces se sientan, evidencien y suenen como negativas.

Si quiere avanzar más en el tema, escríbanos a misresultados@riquezaextrema.com y cuéntenos cuáles son sus principales retos a la hora de actuar o pensar en sus resultados extraordinarios. Le responderemos con múltiples opciones para que usted logre lo que quiere.

 

JaManza