Desde la perspectiva de la Programación Neurolingüística (PNL) se definen tres maneras de percibir el mundo: La visual, la auditiva y la kinestésica. Desde antes de nacer estamos percibiendo al mundo a través de nuestros sentidos y así será siempre. A estas maneras diferentes de ver el mundo les llamamos Sistemas Representacionales.
Cada quien tiene su forma específica y especial de captar lo que le rodea. Al tener cinco sentidos, es lógico que captemos al mundo con todos los sentidos; sin embargo, alguno de estos sentidos domina a los demás y lo usamos con mayor frecuencia. Algunas personas prefieren (inconscientemente) usar inicialmente el sistema visual. Es decir se fijan más en los detalles visuales y por lo tanto recuerdan más lo que ven y no solo lo recuerdan, sino que también hablan de ellos en términos visuales.
Los auditivos lo hacen igual: Se fijan más en los detalles auditivos, en lo que dice la gente y así lo recuerdan, y también su lenguaje está influido por términos auditivos. Los kinestésicos (aquí incluimos el tacto, el olfato y el gusto) registran sus experiencias del exterior con los matices que ofrecen estos tres sentidos, así los recuerdan y así los producen.
Veamos con más detalle cómo se puede reconocer a una persona visual: En general es una persona con alta energía; su imagen es lo más importante, por lo tanto está siempre bien arreglada; son personas por lo regular bastante ordenadas, tanto en su persona como en su casa u oficina; y como piensa en imágenes, habla de prisa.
Los visuales no solamente se pueden reconocer por su arreglo personal, sino que también cuando hablan suelen utilizar con frecuencia frases como: «A simple vista», «Está bien visto», «Un regalo para la vista», «Ya veremos»…
Los auditivos son personas con un nivel de energía más tranquilo. Son más sedentarios; su arreglo es bueno y conservador, sin llamar la atención; su discurso es importante; cuidan mucho lo que dicen y por tanto les gusta leer para tener un buen manejo del lenguaje oral.
A los auditivos les acompañan términos lingüísticos auditivos como por ejemplo: «Inaudito», «Llamar la atención», «Oídos sordos», «Palabra por palabra»…
Los kinestésicos suelen vestirse cómodos, la moda les interesa poco o nada, su energía es tranquila y hablan sin prisas, buscan su comodidad, gustan de los deportes y la buena comida, son personas muy sensibles.
Ellos también suelen usar expresiones sensoriales como: «Es un bálsamo para el espíritu», «Camisa de once varas», Discusión acalorada», «Es un martirio»…
Por lo tanto, frente a una misma experiencia, como un viaje, una celebración, o una simple reunión, cada persona con su específico sistema representacional dominante, calificará ese evento en forma muy distinta. Sin embargo debemos darnos cuenta que cada quien tiene razón en lo que dice, pues es su manera de captar las cosas. De esta manera, el que el otro no vea lo que usted ve, no escuche lo que usted escucha o no sienta lo que usted siente no es un defecto, sino que cada persona tiene una forma diferente de filtrar y clasificar información.
Recuerde que, como se lo he mencionado en artículos anteriores, ningún sistema es mejor que otro, simplemente son diferentes. Darse cuenta de estas diferencias le permitirá ser más comprensivo y flexible en sus relaciones con los demás.
En la segunda parte, que publicaré la siguiente semana, profundizaremos más en este tema. Hablaremos de los sistemas representacionales y las profesiones, los regalos, los hábitos, etc.
Si quiere avanzar más en el tema, escríbanos a misresultados@riquezaextrema.com y cuéntenos cuáles son sus principales retos a la hora de actuar o pensar en sus resultados extraordinarios. Le responderemos con múltiples opciones para que usted logre lo que quiere.
JaManza