De un tiempo para acá, gigantescos escándalos de corrupción en el país han acaparado la agenta mediática nacional.
Ya sea en la radio, en revistas y periódicos o en noticieros y programas de análisis… o hasta en una simple reunión de negocios o familiar, tarde o temprano el tema a tratar termina siendo el millonario desfalco al sector de la salud que por estos días nos deja atónitos, el Grupo Nule y el robo de recursos a través de contratos para ejecutar obras viales en Bogotá, o el famoso subsidio de AIS (Agro Ingreso Seguro) que terminó beneficiando a numerosos terratenientes a la hora de recibir privilegios por parte del ministerio de Agricultura, entre muchos otros.
Debido a este tipo de sucesos, las personas comienzan a asociar directamente la riqueza con la corrupción, hasta que, sin quererlo, acaban por pensar y asumir que la gente rica lo es porque algo malo hizo.
Alguien que escucha ese tipo de juicios desde niño, automáticamente elimina sus propias opciones de vida y juega solamente a ser bueno o malo, asociando el tener dinero con ser malo y el no tenerlo con ser bueno.
Le tengo una noticia: Las personas pueden llegar a ser extraordinariamente ricas buscando generar compulsivamente valor en su entorno. Seguramente alguien en su vida le ha dicho “De lo que usted da, recibe”. Esto, en nuestro lenguaje, se traduce a que mientras usted impacte a más gente positivamente, más dinero atraerá y recibirá.
Pero ¿Por qué alguien puede llegar a creer que la única forma para ser rico es ser corrupto? La respuesta es porque tiene la falsa creencia implícita de que ese es el único camino y le cuesta trabajo conseguir modelos de gente no corrupta que esté logrando resultados.
Es muy importante que los modelos existan en su vida para que usted pueda crear y tener lo que quiere… y ¿cómo lo logra? Leyendo un libro de algún millonario contando su historia o accediendo a una entrevista con alguien y preguntarle cómo hizo para amasar su fortuna.
Al término de la misma usted se va a dar cuenta muchas veces de que ese proceso no tuvo nada que ver con ser corrupto o con tomar decisiones fuera de la legalidad, de lo ético y lo moral.
Si yo decido ser rico dentro de lo ético y lo moral, así va a ser, porque la creencia genera realidad y no al revés. Creer para ver y no ver para creer.
Seguramente habrá personas que nunca van a explorar su máximo potencial para ser ricas porque su sistema de valores no les permite ser corruptas. Aquí lo importante es comprender que puedo llegar a ser millonario generando valor a otros y sin robar a nadie.
¿Y qué tal si creáramos una nueva raza que esté dispuesta a tenerlo todo en la vida sin ir en contra de lo que dicta la moralidad?
En Riqueza eXtrema queremos que la gente, y sobre todo los padres de familia, empiecen a hablar de riqueza como un tema ligado a la moralidad, a la legalidad y a la ética.
Una persona extremadamente rica es una persona sin límites ni taras mentales, y hago especial énfasis en que decir ‘sin límites’ no implica hacer daño o pasar por encima de los demás.
Por último, tenga en cuenta que cualquier persona involucrada en los escándalos de corrupción que mencioné al principio no es rica. Ser rico es sentir que la riqueza es propia y que nadie puede cuestionar sus orígenes, porque fue lograda a través de una generación compulsiva de valor en los demás.
Si quiere avanzar más en el tema, escríbanos a misresultados@riquezaextrema.com y cuéntenos cuáles son sus principales retos a la hora de actuar o pensar en sus resultados eXtraordinarios. Le responderemos con múltiples opciones para que usted logre lo que quiere.
JaManza