¿Han notado que a muchas personas parece que el universo o el destino los haya llevado a un callejón sin salida?
¿Nada se mueve y si se mueve es para el lado contrario?
¿Parece que les hubieran llegado las 7 plagas?
Hay forma de desbloquear esas situaciones y ese desbloqueo muestra resultados velozmente y casi milagrosamente.
¿Que nos pasa? ¿Qué produjo esa mala racha? ¿Como entré en ese callejón sin salida?
Se cae en una situación de bloqueo donde todo parece ir mal cuando se violan ciertas reglas o leyes de la naturaleza o del universo y por eso es necesario verificar el estado de 6 escenarios muy frecuentes y corregir o cambiar nuestra posición al respecto.
El primero y más frecuente es cuando uno interfiere en la vida de los demás con acciones que pretenden cambiar los acontecimientos que esa otra persona tiene que vivir o que la llevarán a aprender de la vida. Interrumpir el ciclo natural de otra persona es un asunto grave que de inmediato genera bloqueo a quien lo hace. Recuerde que todo lo que hacemos vuelve a nosotros para bien o para mal. Si no nos han solicitado ayuda o no nos han llamado para intervenir y si no somos los expertos que podemos resolver el problema, se nos devuelve peligrosamente la intervención por interrupción de aprendizaje o de ciclo vital en la otra persona. Hay que evitar meter las narices en las vidas ajenas o se paralizará la energía propia y la de los que nos rodean. Deja uno de intervenir y la magia que desbloquea los trancones y los dramas aparece.
Lo segundo, también frecuente, es que uno no acepta la realidad como es o como llega, bien sean situaciones, hechos o personas y en consecuencia se genera una insatisfacción o malestar porque las cosas no son como deseamos o queremos. La violación aquí es que las cosas son como son y lo que sucede es lo que debía suceder, ni más ni menos pero no tiene por qué coincidir con nuestra voluntad. Cuando buscamos insistentemente hacer nuestra voluntad, nos estrellamos y el universo nos devuelve la respuesta con dureza para hacernos reflexionar hasta que reconozcamos esa verdad, aprendamos y respetemos. Hay que aprender a aceptar con sinceridad y no por conformismo. Aceptar la realidad y no discutir por ella hace que se desbloqueen los trancones y todo empiece a fluir.
Como tercero está el agradecimiento o la gratitud. Las personas viven inconformes con lo que tienen o lo que son y eso resulta ser muy bloqueador. Cuando uno aprende a valorar lo que tiene, así sea poco y valora lo que es, así sea mínimo, desaparecen las insatisfacciones, los malestares y el sufrimiento, el universo ve que hemos aprendido una lección vital y aparece la felicidad. Hay que agradecer con sinceridad para poder destrabar el bloqueo.
El cuarto elemento es el perdón que debemos pedir o debemos dar para borrar los errores en el tablero de la vida. Si no borramos el tablero, nos llenamos de mugre y eso sin duda bloquea la energía haciendo que no fluya como debería. Tener pendientes los perdones es tener mugre en nuestra historia de vida y en consecuencia detenemos el flujo.
El quinto es aprender a desear a los demás lo mejor, independientemente de como la llevemos o como nos haya ido con ellos. Recuerden que la vida es como un búmeran, que todo lo que lanzamos al aire, si no impacta el objetivo, se nos devuelve. Incluso al peor enemigo hay que desearle el bien. Desear un mal a otra persona es por la ley de correspondencia desearnos mal a nosotros mismos y allí nos bloqueamos. Es un autogol.
El sexto es aprender a despegarse de las cosas o de las personas o de las vivencias negativas y en ese sentido saber soltar o desapegarse. Cuando uno suelta lo que tiene aferrado o pegado a la vida o en el pensamiento y lo deja ir, la magia aparece y hace florecer todo alrededor. Nada nuevo llega a nosotros si no soltamos lo viejo, cuando generamos el efecto de vacío, de inmediato el universo llena ese vacío.
En resumen, nuestra vida florece mágicamente cuando aceptamos y agradecemos lo que somos y tenemos y la realidad con los demás incluidos, cuando ejercemos el perdón, cuando deseamos lo mejor a los que no nos gustan, cuando aprendemos a soltar o desapegarnos y cuando evitamos meter las narices en vidas ajenas.
Analice su actual situación y vea cuál de los seis escenarios está incumpliendo o violando y en consecuencia cambie su forma de actuar o de pensar para que rápidamente la magia del desbloqueo aparezca y su vida empiece a florecer y a fluir como Usted lo necesita.