Con el transcurrir de los años, cada vez valoró más el  mágico poder de la honestidad, una virtud tan preciada que observo se ha ido perdiendo en estos tiempos, quizás por el interés y el deseo de poder de la gente, por el miedo y por las mascaras que cada ser humano se ha puesto para sobrevivir en la jungla social.

El mágico poder de la honestidad, es difícil de practicar en un mundo lleno de tentaciones, falsedades y presiones sociales. Todo ser humano cuando nace, viene desprovisto de esas mascaras, su corazón es limpio, genuino, auténtico.  Mira el rostro de un bebé, y comprobarás que la honestidad se refleja en todo su ser.

La vida se transforma 

Como Coach de vida, ejecutiva y de equipos he sido testigo de casos en donde las personas deciden ser honestas consigo mismo y los demás, se liberan de toda la basura emocional que llevan por años. El mágico poder de la honestidad transforma las interacciones personales, sociales y laborales. La honestidad se percibe como un principio moral básico, pero su verdadero impacto va mucho más allá de lo ético. La honestidad, es un valor intrísenco que promueve el bienestar emocional y fortalece los lazos humanos.

Como Coach  he experimentado en mis cientos de sesiones de coaching con altos ejecutivos, que cuando por fin las personas logran ser honestas de corazón, vuelven a ese estado maravilloso de la vida, cuando somos bebes y no existen dilemas para aceptarnos así mismos.  Solo somos. Cuando miras el rostro de un bebé,  su transparencia llega a eclipsarte.

 La honestidad en el largo plazo, puede ser la clave para alcanzar el éxito, además de convertirse en el principal pilar de la confianza.  El mágico poder de la  honestidad construye sociedades y es un acto de valentía.

Base de la confianza

El mágico poder de la honestidad establece confianza y la confianza es la base en la que se construyen las relaciones humanas en todos los ámbitos. Cuando alguien actúa con honestidad, está enviando un mensaje claro: «Puedes confiar en mí». Esta transparencia, aunque a veces incómoda, genera un ambiente en el que las personas se sienten seguras, valoradas y respetadas.

Por otro lado, las mentiras y las falsedades, aunque en un principio pueden parecer inofensivas o útiles, siempre tienen un costo a largo plazo. La desconfianza genera inseguridad, desconfianza mutua y, en última instancia, puede destruir una relación. La honestidad, en cambio, transforma corazones, permitiendo que la comunicación sea clara y efectiva, lo que facilita la resolución de problemas, la construcción de equipos, la colaboración, la empatía, y la fe en sí mismos y en la sociedad.

¿Por qué a veces es difícil ser honesto?

Pese a que el poder de la honestidad es un principio primordial, a veces las personas se sienten tentadas a ocultar la verdad, especialmente cuando habita la creencia limitante de que ser transparente podría acarrear consecuencias negativas.

A veces, se piensa que es mejor decir mentiras, por miedo al rechazo, a perder oportunidades, o incluso a herir a otros, sin embargo, siempre el poder la honestidad terminará brillando sobre cualquier otro acto oculto. La verdad siempre saldrá a la luz.

No siempre será fácil ser honesto, pero cuando este acto se impone se terminará generando mayor abundancia, se requiere de valentía y coraje especialmente en situaciones complicadas, sin embargo, cada vez que elegimos ser honestos, vamos ganando como seres humanos ya que fortalecemos nuestra integridad y nos acercamos a convertirnos en una mejor versión de sí mismo.

La pregunta del coach: giovannafuentes@yahoo.com

¿Qué regalos te ha brindando la vida por ser honesto?

¿En qué momentos de tu vida, has acudido al poder de la honestidad?

¿Cómo gestionas la honestidad contigo mismo?