En una nueva cultura de progreso se hace necesario que los líderes, personas que tienen cargos de poder, y que tienen equipos bajo sus alas, observen y desarrollen nuevas habilidades para dirigir, para liderar y pasen de las estructuras rígidas, paquidérmicas por estructuras flexibles y más cercanas a la gente, en donde en las organizaciones y empresas el dialogo y la escucha sea la variable que predomine en la construcción de compañías que evolucionen e interesen por el talento humano de una forma genuina, pues de ello, dependerá su rentabilidad.

Durante años, realizando mi ejercicio de Coach y periodista, he observado que los seres humanos a veces, hacemos juicios a la ligera, sin conocer al otro, sin saber realmente su esencia, porque estamos enfocados en nuestros paradigmas donde el mundo gira desde nuestro ombligo, y quizás si hiciéramos consciencia de que nuestra manera de observarnos y observar a los demás, incide en la forma como nos relacionamos a diario, en la forma como construimos relaciones y obtenemos resultados.

Es por ello, que traigo a colación la famosa frase del escritor y poeta alemán Johann Wolfgang von Goethe: si tratas a un ser humano como es, seguirá siendo lo que es; pero si lo tratas como puede llegar a ser, se convertirá en lo que está destinado a ser’.  Si analizáramos el transfondo de estas palabras pronunciadas por el poeta alemán, quizás tendríamos mayor consciencia de cómo nos relacionamos con otros, en nuestro día a día.

Esta frase de Goethe, refleja la invitación que quiero hacerle a cada uno de ustedes, empresarios, líderes, lectores, héroes de a pie, en fin a todos los que se encuentren con este artículo de aplicar la mirada apreciativa.

En otras palabras, nuestra mirada condiciona las posibilidades de realización no solo de todo ser humano sino de toda forma de vida”   El escritor afirma que creyendo en cada uno de nuestros trabajadores, compañeros, hijos, personas cercanas a nuestra empresa, u organización, e institución, podemos apoyar a florecer a otro ser humano, a sacar lo mejor de sí mismos.

El escritor español, Alex Rovira, colega por cierto, tiene una frase que comparto totalmente, él dice que hay personas que tuvieron y tienen la posibilidad de ir a la universidad, tener muchos títulos cargos en fin, pero que son tremendamente maleducadas, porque están desconectadas de su corazón.  Y que hay personas que no tuvieron la posibilidad de acceder a una carrera, estudios, pero que son sabias, humildes, compasivas, educados, porque están conectadas con su corazón.

Entonces cuando hablamos de la mirada apreciativa es hacer consciencia de que condicionamiento o creencia predomina en ti para juzgar al otro y condenarlo sin siquiera darnos la oportunidad de conocerlo.  Quizás si te esforzarás a mirar más allá de tus paradigmas podrías ver que una palabra, la actitud, un gesto, puede transformar la vida de otros ser humano y llevarlo por las sendas del bienestar.

En el mundo empresarial, a veces observo que las personas por estar en la carrera del ego, y esa actitud contemporánea de que todo hay que hacerlo de prisa, y en el cuento de que estoy tan ocupado, no pueden ver el brillo de otros y se pierden de valores claves para el desarrollo de los equipos de trabajo. Es más me atrevería a decir que ni siquiera han visto su propio brillo, por eso no pueden aplicar esa mirada apreciativa que empieza primero por ti mismo, y luego por el otro.

Pero, esta mirada apreciativa no solo se debe aplicar en las organizaciones sino en todos los ámbitos de la sociedad, en los colegios, debe ser el lema de padres, profesores, alumnos, jefes, compañeros, instituciones en fin… Todos estos elementos fungen como catalizadores de la evolución de la sociedad.

Esta mirada apreciativa se logra por medio del respeto, la admiración mutua, el afecto genuino, la honestidad, el descubrir y aceptar que como seres humanos somos vulnerables y que la vulnerabilidad, forma parte de la humanidad, el abandonar juicios, transformar creencias, y paradigmas culturales, entre otros aspectos en esta ‘sociedad del cansancio’ de Byung Chul Han.

La pregunta de coach giovannafuentes@yahoo.com

¿En qué momento de tu vida, alguien practico contigo la mirada apreciativa?

¿qué podrías transformar en ti, para aplicar la mirada apreciativa como líder o jefe en tu equipo de trabajo?

¿Cómo te ves tu mismo con una mirada apreciativa o desde el ego y el juicio?

Te invito hoy a que practiques a consciencia la mirada apreciativa, y recuerda que una palabra, un gesto, una actitud, puede transformar la vida de otro ser humano y hacerla florecer.