Algunos analistas económicos han salido a explicar el actual déficit fiscal de casi 30,5 billones de pesos como consecuencia de la caída del petróleo en los mercados internacionales y ante la gravedad de la situación concluyen que una reforma tributaria que aumente el recaudo de impuestos entre el 1% y el 1,5% del PIB es urgente puesto que los dos recortes del gasto hechos por el gobierno (hasta el momento) no serán suficientes para hacer frente a esta problemática. Esto no es nada nuevo y es muy similar a lo que el gobierno sostiene, pero muchos somos conscientes que dicha reforma no será tramitada hasta que se concrete el proceso de paz. A pesar de esto culpar al petróleo del déficit fiscal en un país corrupto e impune es una verdad a medias que intenta disfrazar una problemática que nuestra sociedad ha sufrido por décadas.
La corrupción en Colombia.
Si el culpable del actual déficit fiscal es el petróleo lo justo sería que el crudo resolviera el problema y aportara algo del dinero que el país recibió del mismo por más de 5 años desde Junio del 2009, hasta Noviembre del 2014 cuando el petróleo estuvo por encima de los USD70 (ver Gráfico de Precios Mensual del Petróleo), sin embargo de ese dinero ya sabemos que alrededor de 12 Billones de pesos se “perdieron” en Reficar y posiblemente se “perdió” otro «poco» en cuantías más pequeñas pero de igual gravedad en casos como el de Fidupetrol. En mi concepto que un país progrese se debe a tres cosas: La educación, la salud y la infraestructura y lamentablemente Reficar no es un caso atípico, ya que los pilares del crecimiento también están infectados de corrupción. En Educación podemos citar esta denuncia del propio presidente acerca de perdidas de recursos por COP$132.000 millones, naturalmente no es el único caso de este tipo. Si hablamos de la salud podemos citar como ejemplo a Caprecom (4 Billones de pesos), Saludcoop (1,4 Billones de pesos) y Cafesalud entre otros. En cuanto a la infraestructura me gustaría recomendarles «En las entrañas del monstruo» de la Revista Semana que expone con lujo de detalles como es la contratación en Colombia y evidencia los nexos de políticos y criminales para repartirse nuestros impuestos, algo que no es un secreto para nadie ya que esta gente es tan descarada que usa los carros oficiales para transportar las ganancias producto de ilícitos. Según «En la entrañas del monstruo» es claro porque el actual alcalde de Bogotá cuya campaña financiaron en una parte considerable las constructoras quiere intervenir los «potreros» de la Van Der Hammen o porque teniendo en cuenta los conflictos de interés que tiene con Volvo, prefiere hacer un metro elevado y más Transmilenio (algo muy provechoso para la concesionaria alemana), en lugar de un metro pesado subterráneo mediante una concesión, algo estrictamente necesario para una megaciudad como Bogotá que ya es la tercera ciudad más poblada de Latinoamérica . Y el que piense que soy «mamerto» por esas criticas a un político de derecha, quiero decirle: Uno, criticar a un político no indica afinidad con su opositor; Dos, la izquierda no se salva, Gustavo Petro esta en la mira de la procuraduría y la fiscalía, y el famoso carrusel de la contratación por el que fueron condenados los Nule y Samuel Moreno tiene sus orígenes en la izquierda dejando en evidencia que la corrupción es simplemente ambidiestra. También quiero hacer salvedad de que estos son unos pocos ejemplos de lo que es la corrupción en Colombia, por supuesto no es la totalidad de casos de la misma, ya que mucho de este tema ni siquiera debe ser público.
La impunidad en Colombia.
Como si el cáncer de la corrupción no fuera suficiente, a este mal debemos sumarle la impunidad, producto natural de que sean los corruptos quienes hacen las leyes. Este país es un lugar donde 9 de cada 10 homicidios terminan en la impunidad, un lugar donde alguien como los Nule, después de saquear al estado en 150.000 millones, son enviados a un «apartahotel» en la picota donde pueden hacer asados con Whisky, haciendo del centro penitenciario más un lugar de recreo que una cárcel. También es un lugar donde el político estrella de la derecha es un senador con más de 186 investigaciones en la comisión de acusación, ¡por supuesto en la comisión de acusación! ya que a los políticos los rigen leyes diferentes a las nuestras y no los puede investigar la «justicia» ordinaria y tienen sus propias entidades para ser «investigados». Este país es tan impune que los políticos y contratistas no se molestan en disimular su relación con criminales ya que los desfalcos al estado rara vez terminan en una condena (y si lo hace es irrisoria) y mucho menos en la devolución del dinero. La impunidad es a tal nivel que el propio presidente con voz enérgica denuncia saqueos a la salud, pero jamás se recupera un centavo de nuestros impuestos o se emite una condena al respecto. En resumen y sin ahondar más en el tema, dejando por supuesto mucho de lado: Colombia es un país que con vergüenza ostenta el título del tercer país más impune del mundo.
La indiferencia del Colombiano.
Desde los memes de Pablo Escobar hasta que su primo hermano sea senador de este país, pasando por «Lo malo de la rosca es no estar en ella», «El vivo vive del bobo», si lo roban es «porque da papaya», más el simple hecho de que siga votando por los mismos, en lugar de exigir un referendo constitucional, ejecutivo, legislativo y judicial, que frené esta situación, son evidencia clara de una total indiferencia ante la corrupción y la impunidad, así como una total ignorancia de la realidad a la que nos enfrentamos «en el país más feliz del mundo»; realidad que se ha cocinado durante décadas con un efecto bola de nieve, porque es claro que los corruptos no empezaron robándose billones, probablemente empezaron con miles de pesos, saltaron a millones, luego a miles de millones y actualmente vamos en billones, en cifras que tristemente se asemejan al déficit fiscal, y que probablemente sean la punta del iceberg, ya que no creo posible que la cuantía total de la corrupción sea de nuestro conocimiento, pero de lo que si estoy seguro es que no solo es lo del deficit, en su mayoría la cuantía de la corrupción es lo que nunca se invirtió en salud, educación y en infraestructura, son esos 30 o 40 años de atraso que tenemos frente a los países del primer mundo que dejan en evidencia que tal vez hay más cosas malas de la «rosca» aparte de no estar en ella, que si el vivo vive del bobo, el bobo somos nosotros y que si nos roban por dar papaya tal vez es tiempo de dejar de darla.
El colombiano promedio es indiferente a esta problemática y repite como «Lorito» que el problema de Colombia son la «FAR», además que sin razón lógica alguna le produce pánico que en el proceso de paz le regalen el país a Timochenko y le angustia vivir con 8.000 guerrilleros, como si ya no viviera con más de 30.000 paramilitares de otro inútil proceso de paz como lo fue «Justicia y Paz» ya que estos delincuentes mutaron en Bacrims. Según esto podemos concluir que la «FAR» también mutaran y que hacer la paz con los gobiernos simplemente será integrarse de una manera más «legal» en la cadena de corrupción del país, y me permito citar nuevamente algo que coloque en un párrafo anterior, aquí las Bacrims, paramilitares mutados, remanentes de una farsa de proceso de paz, transportan las ganancias de sus ilícitos en carros oficiales; ¿Pero puede esperar algo más de esta gente? Por supuesto que no, los ilegales (Paramilitares, Guerrilleros, Políticos, Mafiosos etc.) no pelean por ideales, lo hacen por dinero y su finalidad es tener una tajada del «Pastel» (Nuestros Impuestos, Nuestras Tierras y lamentablemente a veces también nuestras vidas) algo a lo que simplemente ningún gobierno le ha puesto freno, al contrario se alían con ellos, para entretenernos con la «FAR», la televisión y el fútbol, mientras se roban los impuestos.
¿Cómo se comportan los Déficits en este contexto?
Los huecos fiscales son un circulo vicioso con tendencia a la expansión ( Ver Gráfico Evolución del Déficit como % del PIB ), el déficit cae temporalmente, sin embargo al pasar el tiempo se vuelve generar, y lo más triste para nosotros, es que el nuevo déficit siempre es más grande, de tal forma que el déficit por ejemplo de finales de milenio, del que muchos hablan que ha sido una de las peores crisis de nuestra economía, es más pequeño que el déficit de 2.010 y el de 2.010 es inferior al que afrontamos en estos momentos (Ver Gráfico Déficit en Millones de USD).
¿Cual es la estrategia de los gobiernos para hacer frente a esta realidad?
La tendencia de los gobiernos, porque no es solo el de Santos, es tapar los huecos de la corrupción atacando nuestros bolsillos, el anterior gobierno quito las horas extras y aumento la edad de jubilación. Eso podían ser medidas solo contra los trabajadores sin embargo lo que le «ahorró» a los empleadores en costos laborales se los quitó aumentando el IVA del 8% al 16%, una sobretasa del 10% al impuesto de renta, además de un 1,2% de impuesto al patrimonio con el agravante social de que no pagarle bien a un empleado genera desigualdad (Revise cuanto es el mínimo de un empleado en un país desarrollado, DE DERECHA) dejando en evidencia que el político no es amigo de nadie, ni de la inversión, ni del trabajador, ni del empresario, ni del emprendedor, ni de usted o mio porque su noción de igualdad es atacar de igual forma el bolsillo de todos. A pesar de esto sería injusto hablar solo del anterior gobierno puesto que sus antecesores Gaviria, Samper y Pastrana tampoco fueron los gobiernos ideales, de tal magnitud fueron sus malos manejos que el país al término de estos tres periodos enfrentó una de las peores crisis de la historia que no solo obedece a la apertura económica sino a la descentralización de los recursos fiscales y por supuesto al impulso que el narcotráfico dio a algunos de estos gobiernos, porque sino ha oído del proceso 8.000 el resumen es muy sencillo: Narcotráficantes subieron a políticos al poder, algo muy similar a lo que hacen los contratistas hoy en día y que por supuesto involucra lavado de dinero.
Y en resumidas cuentas, antes los malos manejos, la corrupción y la impunidad, la estrategia del gobierno desde que nací (1.984) es incrementar los impuestos:
Por esto para mi otro incremento de los impuestos, más el aumento del endeudamiento por parte del gobierno, sin una política clara y eficiente para enfrentar a la corrupción y la impunidad es un premio a estas últimas y a todos los criminales que ejercen estas dos como profesión.
Jarek Duque
Inversiones y Consultorías
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