Ayer a las 11 de la mañana en Colombia se esperaba un dato importante: el del Producto Interno Bruto, o sea el conjunto total de la producción de un país. Algo tan difícil de medir como contar las arenas de la playa, las estrellas del cielo o incluso las arenas del cielo estrellado playero. Es uno de los datos más difíciles de recopilar, precisamente por el riesgo de contabilizar algo dos o más veces. Me explico, si yo vendo lapiceros con tapa pero le compré la tapa a una empresa de plásticos, si sumo las ventas mías con las de la empresa de las tapas pues estaría sumando algo dos veces, creando un producto interno bruto inflado. De ahí lo complicado e interesante del asunto.
El dato fue 2% y el mercado esperaba 2.1%: prácticamente fue igual a lo esperado. Hasta ahí bien. Sin embargo, me causa más curiosidad otro dato que publican: se refiere al dato del “Revisado”. Esto ya lo había mencionado antes en otro episodio de La Vida en Finanzas: quiere decir que el dato anterior, o sea el que publicaron varios meses atrás, que supuestamente era 1.3%, pues ya no es 1.3% sino que lo cambiaron a 1.2%; es decir, el “revisado” fue 1.2%. Así se dice. Es como decir que lo que publicaron hace tres meses ya no es.
Enseñanza de la vida: Pueden lanzar un piropo, hacer una declaración ominosa de amor azul turquí o turquesa, jurar amor eterno, prometer el cielo (estrellado con arena y todo) y luego, al cabo de unos meses, decir que ya no.
Pueden decir que el revisado es otro dato.