Siempre considero necesario actualizarse en la coyuntura económica; esto es algo que no puede centrarse solamente en los Tes, ya que la economía abarca varios temas, por ejemplo la cartera y el consumo de los hogares. Cada variable incide en el gran bosque, cada dato aporta algo. Ayer en una valiosa charla con los amigos de Investigaciones Económicas de mi entidad, veía que la cartera se ha desacelerado, es decir han prestado menos que antes; mejor dicho, los préstamos de hogaño son menores que los de antaño. Esos menores préstamos contrastan con una liquidez que sigue existiendo, así como el amor: ha bajado pero aun existe, todavía hay rescoldos de amor en los corazones. Conclusión: hay dinero pero no se presta todo, así que está listo por ahí, está listo el gatillo para activarse, está listo para ser invertido. ¿En qué? ¿En dólares? ¿En Tes? ¿En acciones? Eso sí nadie lo sabe.
Se ha incrementado el consumo de los hogares, cosa que me gusta. Y porqué no, podría entonces hilar todo y decir que, si bien no hay tanta cartera, los hogares están comprando más carteras: compran carteras trenzadas de Gucci, cinturones Vélez y tenis Skechers morados. Hay consumo. Hay otro tema coyuntural relevante y es la eliminación de los límites en las posiciones propias de contado en dólares. Quiere decir que ahora habrá más laxitud, menos límites, más horizonte al querer comprar o vender dólares, es algo así. Más permiso.
Había más temas que apunté, pero todo se obnubiló por problemas con una turca. Una turca loca que se porta mal. Sí, la lira turca.
Buena suerte para hoy.