Hay algo que me encanta y yo le llamo «Finanzas predictivas». Vamos avanzando cada vez más en el año. Ya casi termina el primer mes y si miramos qué ha ocurrido, comparando las gráficas desde el primer día hasta hoy, vemos que los precios de los títulos del gobierno han subido, unos más que otros; miremos por ejemplo los que se vencen en abril de 2028: el 2 de enero rentaban al 6.103% , lo que equivale a un precio de 103.398. Hoy 27 de enero están al 5.77%, su precio se ha subido a 105.949. En finanzas no se puede decir que algo es poquito o que es bastante, porque ahí viene la pregunta “¿bastante respecto a qué?”, “¿poquito respecto a qué?”. Esas dos palabras son juicios de valor, hacen parte del campo de la subjetividad. Lo que sí podemos decir es que esa subida en precio es mucho mayor que la de otros meses. El que compró es como si se hubiera ganado un 2.47% en 26 días. Y si lo llevamos a anual es como ganarse un 40.80%. ¿Bastante? No lo sé, lo que les puedo decir es que comparativamente es bastante alto. ¿Para qué todo lo anterior, bastante ahíto en números y teorías financieras de tablero y marcadores rojos? Para decirles que en las finanzas uno puede ser descriptivo y objetivo pero no predictivo ¿Qué lógica hay frente a algún evento financiero? Podemos inventarnos muchas cosas pero a ciencia cierta no sabemos los detonantes. Describir nos ayuda a aprender y nos va minimizando la ignorancia, pero nunca nos quita la incertidumbre.

Y sí, siempre la escritura misma da para hacer descripciones. El sábado pasado, antes de ser DJ en una fiesta de grado, leí algo sobre Mogambo, la famosa película de Ava Gardner, debido a que ese día, 25 de enero, se cumplían 30 años de su muerte. Ava Gardner es mencionada en el libro que estoy escribiendo, es más, de hecho no creo que haya actriz más hermosa en la historia. Sus cejas, su risa, sus labios. Esa película, que vi hace como dos años en DVD casi que conseguido en el mercado negro, trata sobre una competencia en África entre ella (sí, tú, Ava hermosa) y Grace Kelly por el amor de un hombre. Y ahora, ¿para qué les hablé de esta película? Para decirles que en la literatura, además de descriptivo, sí puedo ser predictivo y subjetivo. Ahí, con Ava, puedo hacer predicciones y gráficas, puedo irme con un 100% de probabilidad, una orden Fill or Kill, de que ella será siempre la gran diva.

 

Nota de pie de página: Estos blogs son solo el calentamiento del libro. Son los que calientan los dedos, para adquirir el pasaje hacia la trascendencia.

 

 

Todo lo demás lo encuentran en mi Instagram @kemistrye