Colombia se consolida como un país comprometido con la sostenibilidad, que avanza decididamente hacia su objetivo de lograr la neutralidad de emisiones para el año 2050. Para alcanzarlo, es necesario dar continuidad a la ruta de la transformación energética e incrementar las inversiones en sistemas de generación limpios, entendiendo que son los elementos que garantizan la seguridad energética de la nación, y que abren un abanico de oportunidades para el crecimiento económico y la generación de empleo verde.

De acuerdo con el informe Movilización de la inversión en energías limpias en Colombia: soluciones comunitarias para acelerar la financiación, desarrollado por El Foro Económico Mundial con el apoyo de Marsh, el Ministerio de Minas y Energía, el Ministerio de Hacienda y Crédito Público, y Ecopetrol, las inversiones para el desarrollo de energías renovables en Colombia se han multiplicado por ocho entre 2018 y 2021. Se trata de iniciativas que permitirán explotar el potencial que el país tiene para el desarrollo de infraestructuras, eólicas, fotovoltaicas y de biomasa, con las que se puede responder a una alta demanda energética de forma más sostenible.

Proyectando la transformación energética en Colombia

De acuerdo con el análisis Colombia posee un gran potencial para el desarrollo de energías renovables y tiene una gran oportunidad de convertirse en una potencia mundial en este ámbito. Los abundantes recursos lo corroboran. En 2021, las energías renovables representaban el 25% del suministro energético total del país y el 29% del consumo final. Dentro de estas, la energía hidráulica constituía el 14%, la biomasa el 12%, los biocombustibles el 2,5%, la energía solar el 0,1% y la energía eólica el 0,01%.

A medida que Colombia avanza hacia la transformación de su matriz energética, se están impulsando proyectos de generación alternativa para diversificar y aumentar la participación de estas fuentes en el suministro energético. Las metas para los próximos años incluyen incrementar significativamente la contribución de las energías renovables no convencionales, con el objetivo de reducir la dependencia de los combustibles fósiles y promover un desarrollo energético más sostenible.

“Colombia tiene un notable potencial para el desarrollo de energías generadas con recursos solares y eólicos. Estos presentan enormes desafíos si se tiene en cuenta que están concentrados lejos de los centros de consumo. Para esto, es crucial incrementar las inversiones para los sistemas de producción, transmisión y distribución, así como para aumentar la flexibilidad del sistema eléctrico y manejar la variabilidad inherente de las energías renovables”, afirma David Peña, Líder regional de Energy & Power para Latinoamérica en Marsh

En el estudio se han incluido indicadores que reflejan el actual estado de la red en Colombia y las proyecciones en materia de inversión que se tienen para alcanzar los objetivos de sostenibilidad propuestos, y claro está para responder a la creciente demanda energética de Colombia y la región:

CAPACIDAD INSTALADA CAPACIDAD PREVISTA (2052) INVERSIÓN NECESARIA
EÓLICA 0-31,9MW 9.3-38,6GW 13.300-72.100 millones de USD
SOLAR 0,48-1,1GW 14.5-30,9GW Entre 10.200 y 20.300 millones de USD
HIDRÓGENO LIMPIO (Verde y Azul) 3 membrana electrolítica de polímero (PEM) = 237 kW 1 «otros tipos de electrolizadores» = 4kg H2 /día 16GW (3 millones de toneladas al año [mta]) 2.500-5.500 millones de USD
Infraestructuras de transmisión y distribución 29.179 km +32.000 km >4.700 millones de USD
NUCLEAR 0 1.8GW Entre 6.300 y 12.700 millones de USD
GEOTÉRMICA 100kW <1GW 7.500 millones de USD
BIOMASA 2,1 millones de litros/día de bioetanol; 0,750mta de biodiésel; 200 MW de biomasa (No definido) (No definido)

*Fuente: el informe Movilización de la inversión en energías limpias en Colombia: soluciones comunitarias para acelerar la financiación

Para que Colombia avance en el desarrollo de sistemas de generación de energía alternativa, es crucial que no dependa únicamente de medidas políticas. En lugar de esperar a cambios legislativos o políticas específicas, el estudio destaca la urgencia de explorar soluciones prácticas que puedan implementarse a corto plazo.

Allí se proponen cuatro soluciones orientadas a fomentar un aumento significativo en las inversiones en energías limpias, como factor que garantiza que el país pueda desarrollar y expandir sus proyectos de energía alternativa de manera efectiva y oportuna.

Solución 1: Modelo de cooperación social para proyectos de ER y una transición energética justa

El potencial de energías renovables está concentrado en La Guajira. Sin embargo, la ausencia de infraestructura y las complicadas relaciones con las comunidades han obstaculizado su desarrollo y reducido las inversiones. Para contrarrestar los efectos de esta situación, se han implementado modelos de participación los cuales buscan mejorar las relaciones entre las partes interesadas.

El modelo apunta a mejorar las condiciones sociales, ambientales y económicas en el territorio, y promover una gobernanza efectiva. La implementación de este marco debería fortalecer las relaciones con las comunidades locales y restaurar la confianza en la viabilidad de los proyectos de energías renovables, reduciendo así las preocupaciones financieras y la incertidumbre.

En este momento, TRUST y las partes interesadas regionales han desarrollado un modelo de participación a autoridades y comunidades locales, y buscan apoyo internacional y del sector público para su ejecución efectiva en La Guajira.

Solución 2: Liberar todo el potencial de los clústeres industriales

Colombia ha implementado varias estrategias de descarbonización, que incluyen la mejora de la eficiencia energética, la electrificación y el desarrollo de energías renovables e hidrógeno verde. El estudio confirma que una mayor colaboración entre el sector público y privado podría fortalecer la cooperación y alinear los esfuerzos hacia los objetivos energéticos del país.

Los clústeres industriales, que agrupan empresas en áreas geográficas específicas, ofrecen una oportunidad significativa para impulsar la inversión en energías limpias, mejorar la competitividad regional y generar empleo. En particular, el Industrial de Cartagena está considerando unirse a la iniciativa Transitioning Industrial Clusters del Foro Económico Mundial, que conecta más de 20 agrupaciones comprometidas con la transición a cero emisiones netas. Esta participación podría maximizar el potencial económico y energético del clúster, apoyando así la transición energética en Colombia.

Solución 3: Línea de crédito para el hidrógeno limpio

En Colombia los objetivos en materia de Hidrógeno son más que ambiciosos. En el mediano plazo en el país se deberá desarrollar un centro regional para la producción, buscando ofrecer un coste competitivo de 1,70 USD/kg. A pesar de esto, lanzar un mercado de hidrógeno limpio ha sido complicado debido a la falta de inversionistas, ya que la demanda aún no está claramente definida y los vehículos financieros son limitados.

Para superar estos desafíos, se ha pensado implementar gran parte de lo ejecutado en Chile, donde entidades como el BID y el Banco Mundial, junto con la agencia CORFO, recaudaron más de 1.000 millones de USD para ampliar la producción de hidrógeno limpio. Un modelo que de ser implementado, podría generar una línea de crédito para el hidrógeno limpio en Colombia. Paralelo a esto en el país, se necesita una institución local con capacidades técnicas y financieras para gestionar el fondo.

Solución 4: Mecanismo de seguros para proyectos de transición energética

Para aumentar la financiación de proyectos de hidrógeno en Colombia y mejorar su perfil de riesgo, se propone un programa especializado de transferencia de riesgos. Este programa busca adaptar conocimientos globales a las condiciones locales, aliviando las preocupaciones sobre las disposiciones del mercado de seguros para tecnologías emergentes.

«En el ámbito de los seguros para proyectos de hidrógeno, los aseguradores de primera línea están trabajando para ofrecer una matriz clara de costos y riesgos, lo que permite una asignación presupuestaria precisa que reduce las incertidumbres a lo largo del proyecto. Nuestro objetivo es asegurar que, al iniciar un proyecto, no enfrentemos sorpresas inesperadas y contemos con el respaldo necesario” comenta Peña.

Marsh ha lanzado un mecanismo innovador de seguro y reaseguro para proyectos de hidrógeno verde y azul, respaldado por aseguradoras mundiales como Liberty Mutual, AIG, y Munich Re, entre otras. Ofreciendo hasta 400 millones de USD en cobertura de seguro preacordada  y condiciones uniformes para todos los para riesgos relacionados con la construcción, explotación y carga marítima, además de daños materiales e interrupciones.

Actualmente, muchas empresas enfrentan dificultades para obtener información específica sobre los costos de seguros para hidrógeno y otros sectores como solar y baterías. Estamos comprometidos en superar estas barreras y aportar soluciones que faciliten la gestión de riesgos, mejorando así la seguridad y la viabilidad financiera de estos proyectos emergentes en la industria, completa el ejecutivo.

Atraer inversiones para la transición energética y el desarrollo de sistemas de generación alternativos no convencionales es crucial para asegurar un futuro energético sostenible y resiliente. Estas impulsan la adopción de tecnologías limpias y fomentan la innovación, crean empleos y fortalecen la independencia energética. Es fundamental que los sectores público y privado colaboren para acelerar la transición hacia una matriz energética más verde y eficiente, garantizando así el desarrollo económico y la protección del medio ambiente para las generaciones futuras.


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