Por: Paola Santos, Directora de Recursos Humanos de SAP Región Norte de América

Durante los últimos años se ha incrementado la escasez de trabajadores. Gran parte de esta escasez se debe a la renuncia de jóvenes que han ingresado al mercado laboral a empresas en el sector del empleo formal. Las compañías en todo el mundo ya vieron un aumento en las tasas de renuncia voluntaria en el 2022, lo que ha llevado a pensar en estrategias para evitar que esto se siga presentando.

No son solo las empresas minoristas y de servicios las que están perdiendo empleados y las valiosas habilidades que aportan esos empleados. Las corporaciones de todas las industrias y tamaños luchan por retener y contratar trabajadores capacitados con las habilidades adecuadas para administrar y hacer crecer sus organizaciones. Este es un problema de sostenibilidad empresarial y un obstáculo para su transformación empresarial y digital.

La presión para retener y contratar talento de calidad con sólidas habilidades digitales en particular se intensificó con la pandemia, ya que la necesidad de digitalización empresarial se aceleró entre cinco a diez años. Esta aceleración ha creado brechas en las competencias de los empleados, que también ha generado que organizaciones que antes llevaban de uno a dos años de retraso en la transformación de las competencias digitales ahora lleven una década o más.

Para seguir siendo competitivas y sostenibles en la economía digital, las empresas deben contar con personas con las habilidades adecuadas para ayudarlas a acelerar su transformación digital. En este sentido, se hacen urgentes cuatro pasos para priorizar las habilidades digitales de esas nuevas generaciones de trabajadores y que así sea posible un crecimiento sostenible para las compañías.

Una forma de abordar la brecha de habilidades inmediata es detener esa avalancha de personas que abandona las empresas en busca de mejores oportunidades: la retención siempre ha sido la mejor forma de contratación.

Durante la pandemia, los trabajadores se liberaron de la oficina y se convirtieron, al menos en sus mentes, en empleados fluidos, liberados y libres. Por ello, muchos no han querido volver a trabajos de oficina de tiempo completo.

Teniendo en cuenta esto, es imperativo para las organizaciones satisfacer las necesidades de los trabajadores remotos e híbridos desde diversas perspectivas. Es fundamental desarrollar entornos de trabajo flexibles que equilibren las necesidades de la empresa y de los empleados y creen una experiencia que les encante a los empleados.

Otra forma de abordar las brechas de habilidades es empoderar a los empleados para que trabajen en equipos multifuncionales basados ​​en tareas o proyectos organizacionales. Esta noción de unirse con otros para hacer el trabajo y luego disolverse cuando el trabajo está terminado se conoce ampliamente como equipos dinámicos.

Dichos equipos pueden estar en todas las jerarquías o líneas de negocios y ayudar a crear un entorno de trabajo ágil, mientras impulsan el desarrollo de habilidades. Al aprovechar el talento interno, los gerentes y los recursos humanos no tienen que crear nuevos puestos, encontrar un presupuesto, contratar o respaldar un proceso de creación de equipos con otras tareas que consumen mucho tiempo. En cambio, sus organizaciones comerciales pueden simplemente reunir a los empleados para formar equipos óptimos que puedan concentrarse en tareas y prioridades a corto plazo.

Las organizaciones también pueden adoptar un enfoque de desarrollo y crecimiento centrado en los empleados al brindar acceso a oportunidades internas a través de becas, trabajos, asignaciones temporales, programas de mentores y aprendizaje experiencial.

Esto permite que una organización desarrolle las habilidades necesarias para el futuro, al tiempo que empodera a las personas para crear una carrera completamente propia. Conectar a los empleados con un trabajo significativo y nuevas oportunidades impulsará la adaptabilidad necesaria que les permita obtener mejores resultados comerciales.

Finalmente, invierta en aprendizaje y desarrollo. ¿Por qué? Porque cada transformación digital es también una transformación de personas en la que los empleadores deben mejorar y volver a capacitar a sus empleados para satisfacer las necesidades cambiantes de hoy y la demanda de capacidades del mañana.

Además, las organizaciones deben crear un entorno que apoye el aprendizaje continuo. Por ejemplo, complementar la capacitación formal con comunidades de práctica informales, colaborativas y atractivas que ofrezcan acceso fácil a expertos y el intercambio de conocimientos para desarrollar habilidades rápidamente. Un entorno dinámico de aprendizaje, retroalimentación y entrenamiento empodera a las personas para que se hagan cargo de su desarrollo con confianza.