Por Jair Cuervo, líder de IA y arquitectura de SAP para la región Norte de América Latina

En medio de las profundas transformaciones que ha impulsado la tecnología, las experiencias de compra pueden estar en la lista de actividades que más han cambiado desde la aparición del comercio electrónico, los pagos virtuales o los asistentes de atención al cliente basados en inteligencia artificial (IA).

Sin embargo, a pesar de los avances, aún existen muchos retos para la industria en los que las nuevas tecnologías, incluyendo la IA, pueden ser de gran ayuda, especialmente para los comercios que quieren que sus consumidores tengan una experiencia de compra online más satisfactoria. Aquí es donde la inteligencia artificial desempeña un papel esencial, aportando herramientas innovadoras para cerrar esta brecha.

Uno de los mayores aportes que la IA puede dar al comercio electrónico para mejorar la experiencia del cliente es la personalización. Las plataformas utilizan algoritmos avanzados para analizar datos de comportamiento, preferencias y compras pasadas, lo que permite ofrecer recomendaciones específicas para cada cliente. Un informe de McKinsey resalta que la IA generativa lleva esta personalización a otro nivel, combinando texto, imágenes y voz para crear búsquedas y descripciones adaptadas a cada usuario. Esto no solo aumenta la satisfacción del cliente, sino que también mejora significativamente las tasas de conversión.

En materia de relacionamiento con los clientes, la IA ofrece ventajas en la automatización de campañas de mercadeo que analicen el comportamiento del visitante de un sitio web y que, por ejemplo, genere un mensajes personalizados cuando un posible cliente no termine un proceso de compra o pueda recibir recomendaciones para sumar productos adicionales antes de terminar su transacción.

Pero el aporte de la IA va más allá. Esta tecnología también está revolucionando la gestión de inventarios en el comercio electrónico. Al predecir la demanda mediante análisis de datos históricos y tendencias del mercado, las empresas pueden optimizar el stock, reduciendo riesgos de sobreabastecimiento o desabastecimiento. Esto se traduce en una operación más eficiente y rentable, beneficiando tanto a los minoristas como a los consumidores.

Por otro lado, la atención al cliente ha experimentado una transformación notable gracias a los chatbots y asistentes virtuales impulsados por IA. Estas herramientas no solo responden preguntas básicas, sino que también interpretan el tono y la intención de los clientes, ofreciendo interacciones más empáticas y personalizadas. La capacidad de atender consultas las 24 horas mejora la experiencia del usuario y fortalece la relación con las marcas.

Optimizando las compras empresariales

En el ámbito corporativo, la inteligencia artificial ha redefinido los procesos de compras, simplificando tareas complejas y mejorando la eficiencia en cada etapa. Plataformas como SAP Business AI integran capacidades avanzadas que automatizan y optimizan operaciones clave, desde el abastecimiento hasta el pago.

La IA facilita el análisis predictivo para seleccionar proveedores basándose en datos históricos, garantizando decisiones estratégicas y rentables. Además, estas tecnologías permiten renegociar contratos de manera proactiva, gracias a herramientas que analizan patrones de consumo en tiempo real. Esto no solo reduce costos, sino que también asegura el cumplimiento normativo en todas las operaciones.

En la gestión de facturas y pagos, la IA desempeña un papel crucial al clasificar documentos automáticamente y enriquecer datos para garantizar su precisión. A través de la tecnología es posible predecir fechas de entrega en tiempo real, para que así las organizaciones puedan ajustar sus planes de compra y pagos.

La selección de talento y la gestión de la fuerza laboral también se han visto beneficiadas por la IA. Con el uso de machine learning, las empresas pueden analizar currículums de manera eficiente, reduciendo sesgos y acelerando los procesos de contratación. Esto es especialmente relevante en un entorno donde la flexibilidad y la adaptabilidad son esenciales.

La compra guiada, otra innovación impulsada por la IA, proporciona un enfoque simplificado para cumplir con normativas y estándares internos. Al agilizar el proceso de compra y garantizar su conformidad, esta herramienta ayuda a las organizaciones a reducir costos y mejorar la productividad en toda la cadena de suministro.

La inteligencia artificial está marcando un antes y un después tanto en el comercio electrónico como en las compras empresariales. Su capacidad para personalizar experiencias, optimizar inventarios y automatizar procesos clave la convierte en una herramienta indispensable en el panorama actual.

Diferentes informes destacan cómo la IA no solo mejora la satisfacción del cliente, sino que también impulsa la eficiencia operativa, reduce costos y mitiga riesgos. Estas tecnologías representan una oportunidad única para que las empresas se mantengan a la vanguardia en un mercado en constante evolución. En un mundo digital, la IA es el aliado estratégico que está redefiniendo cómo compramos, vendemos y operamos.