El concepto de inteligencia aplicado a las ciudades definitivamente será una tendencia fuerte para este 2019, lo que implicará el desarrollo de soluciones modernas y novedosas que promuevan la evolución de los países en un contexto global.
En este escenario, los esfuerzos que hagan las urbes alrededor del mundo en materia de transformación digital, podremos verlos reflejados en nuestra cotidianidad, y la tecnología será la columna vertebral para el desarrollo del mundo y para seguir mejorando la calidad de vida de las personas.
Así mismo, es indispensable que los ciudadanos, las empresas privadas y los gobernantes de las ciudades, entiendan que éste es un camino para todos y que implica hacer la diferencia, repensar las propuestas de valor y revaluar los productos y los servicios. Solo así se puede lograr una buena alineación con los desafíos globales que tenemos como humanidad.
En los últimos años hemos tenido un aumento significativo de la adopción de soluciones innovadoras como servicios en la nube, el internet de las cosas, big y small data, las aplicaciones móviles, inteligencia artificial, blockchain, entre otras, las cuales están generando un impacto positivo en el progreso de las grandes ciudades. Sumado a esto, ha llegado una nueva generación de administradores de ciudades, políticos, ejecutivos empresariales y líderes sin fines de lucro que están transformando a las comunidades en ciudades inteligentes que ofrecen mejores condiciones para los habitantes.
Según estudios de Naciones Unidas se espera que para 2050 más del 70 por ciento de la humanidad salga de las periferias para establecerse en centros urbanos; por esta razón, que las urbes deben prepararse para mantener conectados a sus habitantes y brindar mejores servicios que enriquezcan la calidad de vida de los mismos. De igual forma, las ciudades deben integrar cinco aspectos clave que se enfocan en economía, sostenibilidad, gobernanza, seguridad y transporte.
Puntualmente en Colombia, podemos observar avances en diferentes frentes y el gobierno trabaja en formular acciones en más de 48 ciudades del país para la implementación de modelos de mejoramiento de las condiciones ambientales y otras prioridades como conectividad y renovación urbana.
Es indispensable resaltar que las ciudades inteligentes necesitan de ciudadanos digitales. En otras palabras, es necesaria la vinculación entre la tecnología y las personas para lograr una transformación eficiente de las ciudades a través de una perspectiva incluyente y sustentable.
En definitiva, el camino hacia las ciudades inteligentes no se da por separado y no es un proceso de innovación aislado. Por el contrario, toda la comunidad debe trabajar bajo el entendimiento de que son parte de un engranaje y un mismo ecosistema que debe asociarse para generar resultados de alto impacto.
Por Guillermo Brinkmann
Presidente de SAP Región Norte de América Latina