Aquí los que tienen que reinventarse no son solamente son los medios de comunicación si no también sus departamentos comerciales, que se quedaron con los mismos modelos de comercialización de hace 20 años y que solo concentran su gestión en torno a los grandes anunciantes.
Se anquilosaron en su zona de confort y no trascendieron al mismo ritmo que lo hicieron la tecnología y las redes sociales.
Y no es justo que quienes paguen el pato sean los periodistas que son los que a diario ponen el pecho y quienes por años han dado lo mejor de su vida profesional para posicionar los medios para los que trabajan haciendo grandes sacrificios.
Por eso la fácil no puede ser solo despedir periodistas ante la primera crisis que se presente en la venta de publicidad. Como tampoco cobrar a los lectores por los contenidos digitales.
Al respecto me pregunto:
¿Cuántos medios escritos en Colombia han enviado a sus ejecutivos de ventas a revisar modelos exitosos de comercialización digital en otros países?
¿Cuánto han invertido en capacitar a sus ejecutivos en los nuevos modelos de marketing digital que se imponen en el mudo?
¿Qué alianzas estratégicas han hecho con universidades y centros de investigación para innovar en sus modelos de comercialización?
¿Le han abierto en sus esquemas de comercialización espacio a las pequeñas y medianas compañías que representan el 80 por ciento de las empresas del país?
¿Les han exigido, además de incrementar sus ventas, mayores niveles de estudio y de capacitación a sus ejecutivos comerciales?
¿Tiene al frente del área al mismo ejecutivo de hace 20 años?
La tecnología ofrece hoy miles de herramientas que se pueden convertir en valores agregados para atraer clientes. ¿Las conocen los ejecutivos de las áreas comerciales de los medios?
¿Han hecho alianzas con las agencias de publicidad para estudiar, analizar y/o proponer nuevos modelos de comercialización y de estrategias publicitarias novedosas en los diferentes canales?
¿Han contratado a expertos internacionales para que capaciten a sus ejecutivos en estos temas?
La fidelización de los oyentes, televidentes y lectores (prensa e Internet) ya están asegurados. El reto es fidelizar a sus clientes con nuevas y atrayentes propuestas publicitarias en todos los segmentos. Y atraer nuevos anunciantes. La torta de la publicidad no pueden seguir siendo las mismas 20 grandes compañías.
Wener Zitzmann, director de Andiarios, en declaraciones a LR señala que “aunque las cifras muestran un decrecimiento (en ventas de publicidad) no se puede entrar en un estado de alarma afirmando que los medios escritos como la prensa y las revistas se van a acabar, porque lo que está sucediendo es que los tiempos están cambiando y todo esto ha sido por el apalancamiento que ha generado la tecnología”.
Expertos advirtieron al diario que tanto la publicidad como los medios deben empezar a buscar mecanismos novedosos para suplir los ingresos que se están restando.
Y en efecto, es allí donde están fallando las áreas comerciales. Se desconectaron. Les falta ingenio, creatividad. No son audaces. No se arriesgan. No estudian. Los dejó el bus hace rato…
¿Que tal un recorrido virtual en 3D del nuevo centro comercial? ¿O que pueda ‘conducir’ el nuevo carro que lanzó Ford con una aplicación que se colgó en la web de algún medio?
Todos: radio, televisión, revistas, periódicos y portales tiene la posibilidad de innovar en la manera de presentar su publicidad, en la manera en que pueden abriles las puertas a nuevos anunciantes, a nuevos segmentos de la economía como la ‘Naranja’, a las pequeñas y medianas empresas del país que quieren mostrar sus productos al país… a todo ese emprendimiento que está naciendo del turismo… etc.
Para logarlo hay que invertir en nuevas tecnologías, en capacitación, en conocimiento y aprender de las mejores y más exitosas experiencias que se hayan dado en otros países.
Solo así lograremos que los medios vendan más publicidad y no tengan que despedir periodistas, sino, por el contrario, contratar a más de nosotros para seguir haciendo un periodismo de calidad como el que siempre hemos tenido.