Aunque para muchos nuestra cultura no está lista para esta clase de iniciativas, está comprobado que aumentan la productividad. Conozca los escenarios y condiciones favorables para que la medida funcione en Colombia.

Hace unas semanas estuvo en Bogotá Carlos Slim Helú, uno de los hombres más ricos del mundo según la revista Forbes, como panelista de la XXIV reunión del Círculo de Montevideo en la Cámara de Comercio de Bogotá. De todo lo allí expuesto me quedó sonando esta frase de su autoría: “Las industrias deben pensar en capacitar a sus empleados para asumir las nuevas tecnologías y no asustarse ante cambios como el de semanas laborales de tres días”.

Si bien este cambio parece impensable para muchos, ¿qué pasaría si tuviéramos más tiempo? Creo que nuestra mente y cuerpo estarían más despejados y relajados, por lo cual tendríamos más energía y la productividad laboral se incrementaría.

 

“¿Qué pasaría si tuviéramos más tiempo? Nuestra mente y cuerpo estarían más relajados, por lo cual tendríamos más energía y la productividad laboral se incrementaría”.

 

Además, contribuiríamos a la economía del país, ya que al tener más días libres aumentaría el turismo y participaríamos en actividades culturales y deportivas, generando mayor consumo. Y ni qué decir de nuestro entorno familiar y social… mejoraría notablemente.

Revisando la propuesta de Slim, en otros países ya se está aplicando. Tal es el caso de Nueva Zelanda, específicamente la empresa Perpetual Guardian, especializada en fondos de fideicomiso, inversiones y otros productos financieros.  En marzo de este año, inició una prueba piloto con una jornada de trabajo de cuatro días, sin disminuir el salario; los empleados tenían que cumplir con todos sus compromisos laborales de 40 horas semanales, pero ahora en una jornada de 32 horas. Pues bien, fue tan exitoso el ejercicio, que la compañía adoptó el nuevo horario de manera definitiva.

Entonces, ¿afectan estas decisiones la competitividad de las empresas? No. Entre las mejores economías de la OCDE se encuentran Estados Unidos, donde se trabaja 1.783 horas al año; Nueva Zelanda, con una media por trabajo de 1.752 horas; y Alemania, con una media de 1.363 horas, la cual podría disminuir ya que uno de los principales sindicatos metalúrgicos consiguió una jornada laboral de 28 horas semanales por un periodo de 2 años, a partir del 2018.

 

“¿Afectan estas decisiones la competitividad de las empresas? No. En algunas de las mejores economías de la OCDE se trabaja menos horas al año”.

 

¿Cómo estamos en Colombia? En la actualidad, los colombianos tenemos una jornada laboral de 48 horas y  en muchas ocasiones no nos alcanza este tiempo para cumplir con nuestras obligaciones. Así que cabe cuestionarnos: ¿Qué tan productivos somos?, ¿somos competitivos?, ¿qué requerimos para llegar a estar en los niveles de otros miembros de la OCDE?

Aquí algunas respuestas. Se requieren inversiones tecnológicas en la Industria 4.0 y capacitación a los empleados para alcanzar niveles de competitividad y eficiencia en los próximos años.  Pero esta capacitación no puede ser financiada exclusivamente por las empresas del sector público y privado; se necesita de un entorno cooperativo del Gobierno para apoyar y financiar los proyectos de inversión tecnológica.

Por otra parte, es imperativo co-crear empresas innovadoras y desarrollar proyectos conjuntos de I+D entre empresas, universidades, sindicatos, entre otros.

Adicionalmente, al ser miembro de la OCDE podemos recibir asesoría y financiación para proyectos sostenibles que impulsen los diferentes sectores del país.

Pero, finalmente, nada de esto será posible si cada colombiano no decide aportar para alcanzar estas metas a través del mejoramiento de las competencias laborales y de un compromiso real con la empresa para la cual trabaja.

 

Ing. Luz Maribel Guevara Ortega
Directora de los programas de Ingeniería Industrial e Ingeniería de Producción
Facultad de Estudios en Ambientes Virtuales
Universidad Ean