Andres Saenz

RADDAR CKG

 

El sector que un día fue el protegido por muchos en el país, ha ido perdiendo fuerza en su crecimiento tecnológico, innovación y  calidad. Esto no significa que no haya buenos productos o marcas en el mercado, pero grandes compañías solas no pueden jalonar lo que muchos han dejado de hacer.

Textil-confección alguna vez fue un emblemático sector de la economía, que brillaba con sus marcas y productos incluso hasta en el extranjero, Sin embargo tras la caída de algunas compañías y el debilitamiento de otras, junto a otros fenómenos como la apertura económica, el mercado se abrió para que llegaran a Colombia ágiles empresarios extranjeros que se habían dado cuenta que el país tiene una gran oportunidad de mercado, y ellos tenían las herramientas necesarias para entrar en él.

Por otra parte, observando las dinámicas de un mercado que satisface su hambre de vestuario con más de 12 billones de pesos gastados en 2015, las textileras y los confeccionistas saben que los crecimientos positivos que año a año se presentan en moda, no son un comportamiento inesperado, y que el país tiene un gran potencial, pues si así no fuese,  líderes como Coltejer no planearían una reestructuración en sus plantas con el objetivo de crecer, o que Fabricato no decidiera una inversión por 8 millones de Dólares en tecnología. Previendo su crecimiento a dos dígitos ya es una señal de estabilización y nuevos retos.

Entonces, con grandes oportunidades de mercado,  las industrias necesitan apostarle no solo a promociones y descuentos a la hora se incursionar en este, suponiendo que podría ser la mejor estrategia de captación de clientes, o mano de obra barata, mejor aún seria centrarse en desarrollo tecnológico, innovación, y ante todo de calidad, enfocar sus esfuerzos en el producto o servicio, para seguir creciendo en mercados como el mexicano, que tanto atrae a los colombianos.

Lo básico ya se vende, pero apostar a desarrollo de producto, marcas y demás, podrían traer mejores resultados si se conoce el mercado donde estamos, si le apostamos a las tendencias y no a la producción básica como astutamente han manejado algunas industrias, además de aquellas que le apuestan toda a la energía limpia y al reciclaje para la producción de hasta el 40% de sus productos.

Es importante actuar antes que sea tarde y se repita alguna parte de nuestra historia en la que se dejaron pasar grandes oportunidades, aprovechemos la situación actual y promovamos la industria local, apoyemos a los pequeños, y promovamos conocimiento en el consumidor al ritmo que crece el mercado para adaptarnos a los cambios del mismo.