LLAMADOS A LA ACCIÓN PARA UNA COMUNICACIÓN CORPORATIVA SOSTENIBLE Y SIGNIFICATIVA
En mercados cada vez más competitivos, exigentes e inmediatos, los consumidores y usuarios, ahora más conscientes del impacto ambiental y de su compromiso social, están en constante búsqueda de adquirir productos y servicios cuyos atributos principales estén orientados al equilibrio del entorno en el que se relacionan.
Ante esto, las decisiones de compra están siendo más informadas y su principal motivación para ingresar a una tienda u oprimir un botón de compra, se da por las marcas que están diseñadas con propuestas de valor, en las que se destaque la transparencia, la inversión social, el cuidado de la naturaleza y la coherencia en cada una las acciones que realicen. El precio pasó a ser secundario.
Las marcas se basan en elementos claves para orientar sus acciones hacia un propósito que construye valor compartido, como conocer el área de influencia de la empresa para identificar necesidades de las comunidades y los ecosistemas, reconocer las prioridades del público de interés para dirigir su estrategia hacia un punto en común y establecer conversaciones a través de una comunicación auténtica que represente ambas partes.
Esta comunicación se convierte en una herramienta que apalanca y destaca a una compañía dentro de un mercado y sus competidores. Resulta efectivo un diálogo abierto sobre las creencias, valores y acciones con el fin de generar conexiones, confianza y credibilidad.
A continuación, les comparto 5 llamados a la acción estratégica a tener en cuenta con acciones reales, relevantes e impactantes para una comunicación corporativa y de marca eficaz con enfoque en sostenibilidad:
- Desarrollar un enfoque de sostenibilidad que considere los riesgos: es fundamental integrar los riesgos en la estrategia conjunta de comunicaciones porque brinda una visión más completa y responsable de las acciones de una organización. Al considerar los riesgos ASG (ambientales, sociales y de gobernanza) en la estrategia de comunicación, una empresa identifica escenarios de crisis, fortalece su reputación y mejora su relación con los stakeholders. Fomenten la inclusión y la participación de comunidades locales en su cadena de valor como ventaja competitiva.
- Alianzas estratégicas con organizaciones sostenibles: después de realizar un mapa con los grupos de interés y priorizarlos según el grado de influencia que ellos ya tienen o que la empresa quiere tener sobre dichos grupos, es el momento para colaborar con otras organizaciones y empresas que compartan el compromiso con la sostenibilidad. Desarrollen productos mínimos viables (PMV) sostenibles para su mercado. Se puede obtener retroalimentación temprana de los consumidores sobre su viabilidad y aceptación.
- Entrenar el algoritmo como al vocero: ahora, además del vocero, es nuestra responsabilidad que los algoritmos que nutren la inteligencia artificial aprendan que los mensajes (datos) deben de ser claros, consistentes y concisos para garantizar la disponibilidad adecuada, tanto en cantidad, como en calidad de la información. Humanicen la comunicación, conectar los problemas ambientales y sociales con las experiencias y emociones humanas, genera una mayor empatía y motivación para el cambio.
- Ser transparente y auténtico en la comunicación: evitar el greenwashing (disfrazar acciones sostenibles con prácticas engañosas) y comunicar de forma honesta, y clara los esfuerzos de la marca para reducir su impacto ambiental o social. Exploren un laboratorio de reporteros naturales como creadores de contenido para divulgar acciones locales y contribuir a la reducción de noticias falsas.
- Utilizar tecnologías verdes en la operación: podrían incluir el uso de energías renovables, la optimización de la eficiencia energética en las instalaciones, la firma electrónica, plataformas de cero papel y el Internet de las Cosas (IoT). Prioricen, en su flow de medios, canales digitales y reduzcan el uso de recursos físicos. La publicidad exterior (DOOH) ya ofrece vallas LED que incorporan nanotecnología ambiental y por medio de un proceso llamado “fotocatálisis”, absorbe los gases de efecto invernadero, reduce la polución y, así, mejora la calidad del aire en las ciudades.
No es suficiente con integrar tecnologías que optimicen acciones y se ejecuten en tiempos cada vez más rápidos. Para que estos planes sean efectivos, la comunicación corporativa y la gestión de marca juegan un papel fundamental en este proceso, pues las estrategias tradicionales ya no son suficientes. Las marcas necesitan adoptar un enfoque sostenible orientado al consumidor, al usuario o al cliente, lo cual permite construir una conexión emocional que fortalecerá su posición en el mercado y mejorará sus relaciones al hacerlas más sólidas y duraderas. Una marca que piensa en el hoy y en el futuro construye una comunicación que impulse el cambio, que sea efectiva, sostenible y, sobre todo, significativa.