¿Se arriesgarían ustedes a volver al mismo mercado que durante varios años mantuvo en vilo su reputación, su inversión y hasta su libertad?
Pues los hermanos Álvaro y Óscar Ballesteros lo hicieron. Esta vez impulsados por el entusiasmo de Natalia, la hija de 20 años de Álvaro, que los hizo regresar al negocio de la cerveza con un innovador concepto, BrewPub, un espacio donde fabrican y venden su propia bebida artesanal. Resiliencia, le llaman.
En 2008 los dos hermanos, por entonces en sus veinte, decidieron traer al mundo real la famosa cerveza Duff de la serie de televisión Los Simpson, sin saber que la que empezaba como una divertida aventura con una gran acogida en Colombia y Latinoamérica (dio tema para diversos reportajes en los más prestigiosos medios de comunicación del país), terminaría en más de tres años de litigio con la 20TH Century Fox por la marca.
Los Ballesteros crearon la firma Duff Sudamérica S.A.S., registraron la marca en 13 países de Latinoamérica y alcanzaron a comercializar la cerveza en ocho ciudades de Colombia, así como en Chile y Brasil, con una producción mensual entre los tres países de 180.000 botellas, pero en 2011 llegó la demanda de la 20TH Century Fox por la marca.
Algunos países aceptaron la demanda, otros la rechazaron. Al final después de varios años de lucha, en las que Álvaro incluso llegó a ser condenado con ocho años de cárcel, lograron conciliar en 2014 y los Ballesteros dejaron el mercado de la cerveza y se dedicaron a la construcción.
Al recordar la historia, en Álvaro se notan aún los rezagos de una época difícil, pero de pronto sonríe y me cuenta que gracias a un proyecto universitario de su hija Natalia, estudiante de Administración de Empresas, regresaron al mundo de la cerveza artesanal.
¿Qué les quedó de toda esa experiencia? Le preguntó a Álvaro y él me dice que lo acompañe. Me lleva hasta la pared contigua a la barra y me muestra como las tapas de cerveza que nunca usaron la tapizan por completo, como recuerdo de su agridulce aventura. “También rescatamos la receta de nuestra primera cerveza, la Golden Ale”, cuenta.
BrewPub, la nueva aventura
Ubicado en el piso 11,el rooftop de un edificio de oficinas en el sector de Usaquén, con una espectacular vista de los cerros y sobre la ciudad, BrewPub abrió sus puertas para imponer un nuevo estilo en el país, el de fabricar su cerveza en el mismo lugar donde la comercializan.
Así, lograron un espacio chic y casual en el que se aprecian los tanques cromados donde se fermenta y destila la cerveza, que pasa de una vez al cuarto frío y de allí se sirve de inmediato a los clientes, que ya pueden hacer el tour por la micro fábrica y apreciar todo el proceso.
Actualmente ofrecen tres cervezas de línea y en este momento tienen en elaboración otra de temporada. Bebidas equilibradas, limpias, con sabores muy definidos que invitan a repetir.
Estas cervezas tipo ale fueron desarrolladas para BrewPub por la maestra cervecera Lady Rincón Infante, premiada en el país y en el exterior gracias a su trabajo.
Aquí se puede pedir la Golden Ale, una cerveza rubia con 4,8° de alcohol, ligera y muy fácil de tomar; la Amber Ale, con 5° de alcohol, un inicio dulce y de final algo amargo; y por último, la Brown Ale, una cerveza oscura con 5°de alcohol, sabores acaramelados y tostados, mi favorita.
La oferta del bar se complementa con una carta de cocteles de autor, con y sin licor (estos últimos los recomiendo a ojo cerrado).
BrewPub cuenta con una carta muy bien montada y una selección interesante de cortes nacionales y de carne Angus certificada como el Tomahawk, el New York y el Rib Eye. La parrilla es complementada con platos de la cocina peruana, pues cuentan con un chef del país vecino.
De su menú del Pub destaco su rica hamburguesa Angus, la salchicha alemana y las alitas, que aquí las sirven con una crujiente corteza. Si lo prefiere, puede solicitar que le armen un corto maridaje de estos platos con las distintas cervezas y disfrutar así de todo un poco. Ah y pregunten por sus postres con cerveza, sutiles y deliciosos.
Una última sugerencia, lleguen antes del atardecer y espérenlo con cerveza en mano en su terraza, no se van a arrepentir, pues si yo tuviera que escoger un lugar para celebrar estos días de Amor y Amistad, sin duda este sería mi elegido: Una vista espectacular, buena comida, servicio de primera y una gran historia para contar.
Fotos: Archivo particular y Honoria Montes
Carrera 7 N°. 123 – 35, piso 11. Reservas WA: 305 347 7368.
En Instagram: @honomontes