Azul Clarito nació de la idea de cinco amigos de llenar un vacío en el barrio Bolivia de la localidad de Engativá (noroccidente de Bogotá), con una propuesta de valor dirigida a que los habitantes del sector no tuvieran que desplazarse lejos para disfrutar de platos elaborados con ingredientes frescos, con una preparación muy cuidada y precios que se adaptan a su presupuesto.
En conclusión, un gastropub a manteles comparable a los de las zonas gastronómicas de la ciudad. Cada detalle fue muy cuidado para convertir a Azul Clarito es un espacio donde los vecinos del sector puedan celebrar sus fechas especiales, tomarse un buen coctel o una copa de vino, y también para disfrutar de un almuerzo distinto cada día de la semana.
Azul Clarito se ubica en una de las zonas comerciales del barrio Bolivia y su sede es una de las casas estrechas y de tres niveles que abundan allí. Al entrar, la primera sensación es la de un espacio lleno de originalidad, donde predomina el color azul y tonalidades tropicales muy presentes en las obras diseñadas en las paredes y ventanas por una artista local.
A medida que se va subiendo a su segundo y tercer nivel se van descubriendo otros comedores y salitas, perfectas para una celebración más privada.
La calidez de su diseño complementa sus platos de la gastronomía del mundo y de Colombia, servidos muy cuidadosamente y presentados en una vajilla de diseño.
“Nuestro objetivo es que los vecinos del sector puedan disfrutar de un muy buen plato a un precio accesible. Es cocina franca y una comida totalmente distinta a lo que habitualmente se encuentra en el sector. Son recetas fusión, sencillas, basadas en mi experiencia, no venimos aquí con alta cocina, nuestro objetivo es darnos a conocer con platos bien elaborados y con un excelente sabor, nuestros mariscos son frescos, no uso nada precocido, y todos los platos son a la minuta”, explica el chef Daniel Flórez.
El chef de Azul Clarito es un profesional con 22 años de experiencia y ha estado en las cocinas de el Club El Nogal y de hoteles como el Sheraton, el Capital, el Hotel de la Feria y Habitel, entre otros.
El menú abarca una propuesta muy completa. Ceviches de camarón y de chicharrón, entradas para compartir, una selección de carnes, pescados y mariscos en variedad de preparaciones, arroces, pastas, hamburguesas y desde hace unas semanas, también crepes. Recordaron incluir un menú para los más pequeños y alternativas vegetarianas y veganas.
Imperdible el patacón con camarón y hongos gratinados, acompañados de una salsa cremosa de leche de coco y curry, con un exquisito sabor, muy equilibrado. El ceviche de chicharrón, sencillo y muy fresco, es perfecto para empezar la visita.
Detalles divertidos como la limonada de la casa y algunos cocteles y platos que tienen el color Azul Clarito, y la opción de armar su waffle dulce al gusto, con helados y variedad de toppings y salsas, hacen parte de la experiencia del restaurante.
Su carta de cocteles con ocho propuestas distintas, una selección de cervezas artesanales y otras marcas reconocidas como Stella Artois y Corona lo convierten en el lugar perfecto para las reuniones con amigos. La selección de vinos es corta pero contundente, hay jóvenes, varietales y reserva para elegir.
De martes a sábado el menú ofrece a la hora del almuerzo ‘La sugerencia del chef’, un menú completo que, créanme, vale la pena probar y cambia diario. Bistec a caballo, ajiaco, costillitas de cerdo en bbq de la casa, pescado blanco rebozado y bandeja paisa hacen parte de esta opción. Los sábados su parrillada personal se ha convertido en el hit del fin de semana.
Liliana Ruiz, administradora de Azul Clarito es enfática cuando asegura que otro aspecto importante es el servicio. “Queremos diferenciarnos en este tema, por eso estamos trabajándole mucho, asegura esta experta en atención al cliente.
Restaurante Azul Clarito. Calle 80 N°. 103 D – 07. Reservas por WA: (57) 304 3333626. Instagram: @azulclaritogastropub
Fotos: Archivo particular y Honoria Montes
Sigan mi cuenta en Instagram para más recomendaciones: @honomontes