Nubia Rocío Gaona https://twitter.com/nubiaehijos

A estas alturas ¿qué hay para celebrar con el Día del Campesino? Con afectaciones en las vías nacionales que permitan llevar productos de la cosecha hacia las centrales de abasto. Con un deterioro notable de las vías terciarias (las que van de las fincas a las veredas y, luego a los cascos urbanos) y con incrementos permanentes en los precios de los insumos, en Colombia se celebra este domingo -primero del mes de junio como lo contempla el Decreto 135 del 2 de febrero de 1965- el famoso día dedicado a la gente de nuestros campos.

Y… sumemos: la buena actitud de los productores rurales y su compromiso por alimentar al país en medio de la lluvia o el inclemente sol, con el fenómeno de ‘El Niño’ o ‘La Niña’. Frente a adversidades más severas como la violencia, en ocasiones partidista, de guerrillas o simple delincuencia común que busca arrebatar tierras en beneficio de terceros. Y como lo dijo un productor asociado al Comité de Ganaderos del Caquetá, “Con el precio de los alimentos balanceados que ha subido dos veces en lo que llevamos en paro”.

Y a lo anterior, qué tal agregarle el reporte del Dane que registra que las importaciones de productos agropecuarios, alimentos y bebidas, sumaron 9,7 millones de toneladas en el 2020, por las que se pagaron US$6.972,8 millones.

Del total, 8,6 millones de toneladas fueron cereales como maíz, trigo y soya, toda una afrenta contra del sector agrícola si se hacen las cuentas ‘a mano alzada’ del área que no se siembra cuando se importa tal volumen, mientras que el restante del total lo representan productos como papa, pescado, azúcar, café, leche y carne.

Así, a ese precio, ¿quién quiere ser campesino?

De todos modos, pocos o casi nadie quiere serlo. Otra de las razones está en lo peyorativa de la palabra, usada en Colombia para menospreciar a las personas o calificarlas como escasas de inteligencia, cultura y sentido común.

Es más, revisando el Manual de Servicios del Fondo para el Financiamiento del Sector Agropecuario (Finagro) la palabra ‘campesino’ no existe. Y, la verdad, no es pecado ni es nada censurable. Los beneficiarios de crédito y financiamiento, así como de seguros y garantías son los productores rurales.

Ahora, no todo está perdido. La pandemia hizo que la sociedad mirara hacia el campo, hacia los productores rurales a quienes llegaron a calificar de ‘héroes’, palabra bien desgastada y abusada en Colombia por su uso excesivo para calificar a quien hace las cosas bien, sin necesidad de sacrificios o de seguir causas nobles.

Claro, llegaron a ser ‘héroes’ cuando todo mundo estuvo encerrado en su hogar, con familia y mascotas, pensando que el campo y los productores agrarios iban a detenerse, cosa que no sucedió.

La producción se mantuvo y en ningún momento se registró desabastecimiento o incrementos desmedidos de los precios.

Pese a la adversidad, el campo sigue ahí, trabajando y aportando al progreso económico y social de la Nación.

Feliz Día del Campesino…. o, más bien, feliz día para nuestros productores agrarios.

Esquirla: Felicitación muy especial para https://twitter.com/nubiaehijos quien (foto) con sus hijos, cansada de perder dinero en sus cultivos, decidieron volverse youtubers para enseñar a cultivar en casa. Ellos promocionan los tenis  Adidas Stan Smith Primegreen.