Entre los ambientalistas, los veganos y, ahora, los antivacunas, van a acabar con la ganadería y con todas las explotaciones de animales de la zoología doméstica que por más de 13.000 años de historia le han dado de comer a la humanidad, incluso a los familiares de los nombrados al comienzo.
Obviamente tienen derecho a salvaguardar la flora, la fauna, los bosques y los páramos (en eso tienen todo el respaldo necesario), y a negarse a comer un delicioso bisteck de carne bovina, bienvenidos, pero lo denunciado en la pasada feria Agroexpo si que pone los pelos de punta y termina por generar desazón: el viceministro de Agricultura Juan Gonzalo Botero relató la irresponsabilidad de la iniciativa de no vacunar contra la fiebre aftosa, promovida desde el norte del departamento de Antioquia.
Botero no dio más detalles del hecho, pero el promotor de esta macabra idea no deja de ser más que un ignorante, un caradura! Ahora, promover tamaño despropósito quizás sea la amenaza soterrada ante una mano extendida en espera de la generosidad gubernamental, vaya a saber!
Así, de moda volvieron a ponerse los antivacunas no solo aquí, sino en todas las latitudes, un movimiento que comenzó hace más de 150 años y cuya historia, en detalle, está aquí: https://www.bbc.com/mundo/noticias-50952151
Para no dar más lata con el tema, basta citar un ejemplo cercano en el que una persona mayor de edad decidió no vacunarse contra la COVID-19, pues su creencia era que le implantarían un chip que ejercería control sobre su humanidad y que, al cabo de dos años moriría; bastaron dos semanas para que el virus llevara al crematorio al antivacunas y dejara una viuda.
En respuesta a ese incógnito promotor antivacunas denunciado por el Viceministro y, en general, para todos los ganaderos del país, la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán) publicó los cinco factores por los cuales debe vacunarse contra la fiebre aftosa en Colombia, campaña que, por cierto, comenzó el martes 2 de noviembre y se extenderá hasta el inicio de la Navidad, el 16 de diciembre.
1. Medida preventiva: porque el hato bovino requiere de la vacunación contra la fiebre aftosa como medida preventiva para evitar que aparezcan focos de esta enfermedad en el país.
2. Control de enfermedades: debe controlarse el tema de la sanidad animal en lo que respecta a dicha enfermedad, pero igualmente a la brucelosis bovina y a la rabia de origen silvestre.
3. Inmunización y blindaje: la campaña de vacunación busca proteger, inmunizar y blindar la salud de las 29 millones de cabezas que conforman el hato colombiano.
4. Conservar el estatus sanitario: esto es, la certificación otorgada a Colombia por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) que considera a nuestro país libre de fiebre aftosa con vacunación.
5. Barrera no negociable: pues el país necesita conservar dicho estatus dado que la citada certificación se constituye en una de las barreras arancelarias más importantes en el comercio internacional.
Por último, para José De Silvestri, gerente técnico de Fedegán-FNG, “debido a que Colombia ostenta el estatus sanitario hoy tiene acceso a 25 mercados internacionales con los que ha negociado en el 2021 más de USD 240 millones (USD 148,6 millones en carne de res y USD 91,4 millones en animales vivos) en los que Chile, Rusia, Egipto y países de Medio Oriente y África son los mayores compradores”.
“Además, el estatus o la certificación es el pasaporte para la conquista y el acceso a las oportunidades y nichos de los mercados de La China, Indonesia y Estados Unidos”, puntualizó De Silvestri.
De acuerdo con el gerente técnico de Fedegán-FNG la sanidad animal, así como la protección y blindaje del hato bovino y bufalino no son responsabilidad solamente del ICA, del gobierno nacional, de Fedegán-FNG, de los 670.000 ganaderos que tiene Colombia, ni del equipo de 5000 técnicos, profesionales y vacunadores que trabajarán en el segundo ciclo de vacunación, sino de todos los colombianos.
Con información de Fedegán.
Más detalles sobre la fiebre atosa en https://www.oie.int/es/enfermedad/fiebre-aftosa/