Normalmente los analistas se refieren al desempleo como un problema. En lo personal no lo veo como tal, lo percibo como una consecuencia de la viabilidad financiera de las empresas.

Una de las situaciones de fondo que permite generar mayor empleo en un país, radica en la rentabilidad y la viabilidad financiera de las empresas, que dependen de factores internos (precios, costos, gastos, tecnología disponible, talento humano, estructura financiera, entre otros) y de variables externas (moda, tendencia de los mercados, avances tecnológicos, competencia, devaluación, inflación, flagelos como el lavado de activos y el contrabando, entre otras). Los salarios son factores internos y hacen parte de manera muy significativa de los costos y gastos.

Cuando por múltiples factores la rentabilidad se debilita, se hace necesario contraer costos y gastos, como por ejemplo el número de trabajadores, impactando negativamente el empleo del país.

En Colombia, el SMLV se ajusta cada año a partir de una negociación entre los sindicatos, las empresas y el gobierno. En la mayoría de los casos se incrementa con base en la inflación esperada fijada por el Emisor. De acuerdo con la Corte Constitucional, este aumento debe ser superior a la inflación del año inmediatamente anterior, para así garantizar el poder adquisitivo de los empleados.

Adicionalmente a la inflación, es necesario evaluar también la productividad laboral, la cual se define como la relación entre el volumen de salida (producto) y el volumen de entrada (insumo) en un proceso productivo. Este concepto brinda una medida sobre la eficiencia con la cual una economía emplea sus insumos para generar una determinada cantidad de producto y tiene relación con el PIB por empleado.

Mayores niveles de productividad se asociarán con una mayor competitividad del país.

En los primeros días del próximo mes de diciembre se instalará la mesa de trabajo entre el gobierno, los empresarios y los trabajadores, para negociar el aumento que tendrá el SMLV para el 2020.

Hasta el momento solo ANIF ha lanzado la propuesta del 4,5%, teniendo en cuenta la inflación del 3,5% y  la productividad laboral del 1%

Espero que para el 2020 el incremento del SMLV oscile entre un piso del 4% y un techo del 5%.  Los márgenes de rentabilidad de las empresas colombianas están bastante deteriorados con temas de baja productividad, soportan una excesiva carga tributaria y enfrentan una alta competencia y volatilidad en ciertos mercados.

Suena impopular, pero incrementos superiores al 5% podrían propiciar efectos inflacionarios en el país y desequilibrios financieros para el empresariado colombiano, generando a mediano y largo plazo, consecuencias negativas para nuestra economía y para la viabilidad financiera de las organizaciones.

El SMLV es un punto de partida y de referencia para la fijación de los salarios en las compañías, cada empresa es un mundo diferente dentro de un Universo llamado Mercado.

Por tal motivo y con el propósito de rentabilizar las organizaciones y ser cada vez mas competitivos, los empresarios colombianos deben desarrollar e implementar modelos financieros propios de gerencia de valor que involucren compensaciones variables acordes con la rentabilidad de cada compañía. Para que una organización sea exitosa, ésta debe medir y premiar la generación de valor de cada una de sus unidades estratégicas y de sus colaboradores.

Hermann Stangl
Valorador de Empresas
www.valorandoempresas.com