La humanización en las organizaciones también es cuestión de química

Cada vez es más claro que tanto el padre como la madre son parte activa en la formación de los hijos. La idea de que las mujeres son quienes se encargan de la crianza de los niños es una creencia del pasado, y difiere del concepto de sociedad equitativa en el que convivimos hoy. Es por ello que brindar espacios, desde las organizaciones para que los trabajadores, sea la madre o el padre, puedan compartir en familia es fundamental para el crecimiento y desarrollo de una sociedad justa y equitativa. Y es que el cariño y el amor que se comparte con los seres queridos es también cuestión de química, ya que estos sentimientos son resultado de una serie de procesos químicos del organismo que engrandecen al ser, y por ende a la sociedad.

De esta forma, cuando se es padre el instinto llama a buscar, idealmente, un trabajo que permita estar atento del núcleo familiar, mientras se continúa la realización profesional. La flexibilidad laboral llega como uno de los cambios que trajo consigo la pandemia para brindar espacios que posibiliten a los padres trabajadores distribuir su tiempo entre la empresa, momento personal y la familia.

Anteriormente, las organizaciones no orientaban sus esfuerzos en brindar espacios de consenso para hallar un punto de equilibrio entre el trabajo y la vida personal de sus colaboradores. Sin embargo, hoy en día las compañías entienden que el trabajo no puede ser un impedimento para la realización personal y, en muchos casos, es la misma organización que impulsa actividades que promuevan el desarrollo personal de sus trabajadores, como es el caso de BASF, multinacional alemana líder en innovación, que apoya el desarrollo personal de las personas que hacen parte de su organización con iniciativas tales como días compensatorios para que tanto los padres como las madres puedan estar con su familia, brindando medio día libre en el mes del cumpleaños del colaborador, el de su pareja y el de sus hijos. Así mismo, si se tiene un viaje por trabajo en un fin de semana o festivo, en BASF los colaboradores tienen la posibilidad de disfrutar medio día libre en el mes siguiente.

La pandemia aumentó el rol familiar, pues debido a la virtualidad los trabajadores lograron equilibrar su tiempo, participando activamente en su dinámica con la familia, en la educación y cuidado de los hijos. Es por ello que BASF promueve un modelo de trabajo híbrido, para que los padres puedan trabajar desde su casa, gracias a los avances que ofrecen hoy en día la tecnología y sistemas móviles.

Por otro lado, en una ciudad como Bogotá, donde las estadísticas internacionales la catalogan entre una de las poblaciones en el mundo con mayor dificultad para transportarse, la flexibilidad de horarios se convierte uno de los beneficios que más valoran las personas, pues la oportunidad de iniciar o finalizar su jornada en momentos del día diferentes a los convencionales, ayuda a los padres a tener más tiempo con sus hijos, sea a la hora de llevarlos al colegio o de recogerlos.

La flexibilidad laboral, además de otros beneficios como subsidiar el estudio de los hijos de los trabajadores son beneficios que hacen más ameno el clima laboral, además de aliviar el estrés y una de las preocupaciones de los padres de familia. La cultura organizacional representa un papel clave dentro las compañías para lograr brindar un clima de empatía y comprensión a todos los trabajadores que hacen parte de ella. Teniendo en cuenta estos aspectos es que las organizaciones contribuyen, finalmente, al buen desarrollo familiar y social de las sociedades.

¿Quieres saber más sobre cómo creamos química para un futuro sostenible? Escúchanos en nuestro Podcast Cuestión de Química, disponible en Spotify, Apple Podcast y Deezer o escríbenos a comunicaciones-bcn@basf.co