Así hacemos química con nuestros colaboradores para retener su talento
Enfrentarse a situaciones de estrés en el trabajo muchas veces es inevitable; de hecho, algunos sacan provecho de la presión para ser más productivos. Sin embargo, se está convirtiendo en paisaje ver a los colaboradores angustiados, tensionados y ansiosos por no cumplir con sus objetivos. Sin duda, es un error para los directivos permitir que esta condición se convierta en parte del contexto de trabajo. En 150 años de historia hemos comprendido que el camino no está en contar con una fuerza trabajadora dispuesta a someterse a situaciones de presión, pues lejos de sumarle valor al desempeño laboral, lo que esta elección refleja es un serio problema que tienen algunas organizaciones para gestionar su propio rendimiento. Como todo es cuestión de química, es momento de que empecemos a crear lazos más duraderos y fuertes con nuestros colaboradores y pensemos en los beneficios de impulsar lo que nosotros llamamos la productividad sostenible.
Una mala gestión de las cargas laborales no solo deriva en efectos físicos, psicológicos y sociales sobre el trabajador, sino en el incremento de los índices de ausentismo y en un ambiente laboral tenso, que lejos de incentivar la creatividad produce un gran daño para las organizaciones. En BASF creamos química para un futuro sostenible y esto también lo llevamos a la administración de nuestro recurso humano bajo el concepto “desempeño sostenible” donde velamos porque nuestros colaboradores encuentren un balance entre su vida laboral y personal, permitiendo que sea el amor, la pasión y la química que sienta por su labor la que incentive su orientación a la excelencia. En una organización con “desempeño sostenible” los empleados tienen un día a día equilibrado con sus posibilidades físicas y mentales, permitiendo que en los momentos de coyuntura, el dar la milla extra no genere un desgaste excesivo para ellos ni sus familias.
Para procurarles tal bienestar, tenemos disponible para nuestros colaboradores un esquema de beneficios a la carta que incluye cobertura para medicina prepagada, planes complementarios de salud, gimnasio, pilates, servicio de alimentación con opciones de menú balanceado, consultorio médico, profesional de medicina laboral disponible, chequeo médico ejecutivo para nuestros líderes, entre otros. Estos planes de actividades de bienestar, que además de acogerse a las exigencias de la ley responden a los intereses personales de los colaboradores, generan espacios de entretenimiento y conexión emocional con la empresa. Invertir en salud ocupacional debe estar incluido en el ADN de las empresas porque se trata del cuidado real de la fuerza laboral de incentivar nuestro talento que es el futuro de la compañía y que son quienes nos harán cada vez más competitivos en un mundo que lo exige para subsistir.
En una organización con desempeño sostenible los empleados tienen un día a día equilibrado que les permite en momentos de coyuntura dar la milla extra.
Bajo ese esquema, creamos una cultura de autocuidado en el que en equipo cuidamos nuestra seguridad y la de nuestro entorno. Además de contar con el personal con la formación necesaria para atender cualquier eventualidad, velamos por proteger la buena salud de nuestros colaboradores. La seguridad es parte fundamental de nuestra estrategia corporativa y siempre redunda en la protección del bienestar de nuestros colaboradores, ellos deben volver a sus casas sanos física y mentalmente y así mismo convertirse en embajadores de seguridad para sus familias.
Promover ambientes laborales armoniosos y saludables nos ha dado grandes resultados y es la forma más efectiva de hacer química con nuestros colaboradores. El más evidente es que en BASF el índice de rotación voluntario está por debajo del 1%, cifra que nos diferencia de lo que el mercado y compañías similares viven. La realidad es que somos una organización con una gran química para nuestros colaboradores,
Creemos firmemente que el verdadero talento no es fruto de la presión sino de la inspiración, por esto promover ambientes de trabajo saludables, seguros y con “productividad sostenible” debe ser una prioridad en la gestión de todas las compañías. Cuidemos siempre de nuestro recurso más importante: las personas.
¿Tienes preguntas sobre nuestros procesos de selección, convocatorias, cómo es trabajar con BASF o sobre otras aplicaciones de la química en la cotidianidad? Puedes escribirnos a comunicaciones-bcn@basf.com y en nuestra próxima entrada te responderemos.
Definitivamente cuidar el talento humano tambien es cuestión de química ❤
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