Continuando con el análisis técnico, el siguiente tema a cubrir son las medias móviles. Las medias móviles son la mejor forma de confirmar las tendencias que tenemos a corto, mediano y largo plazo, pero con una curva suavizada sin tanta oscilación como la gráfica de precios diarios. Nos ayudan a tomar decisiones de compra con respecto al pasado, comparado con el presente inmediato de una acción. Suena complicado pero es muy sencillo, verán. Leamos entonces.

 

La media, en probabilidad, es sencillamente un promedio del valor de un conjunto de datos. En análisis técnico es exactamente igual, sólo que es una media que cambia a cada paso, es decir, una serie de promedios, a eso se refiere lo «móvil». Vamos a los tres tipos de medias móviles: la simple, la ponderada y la exponencial, y todo se va a entender mejor.

 

Supongamos primero esta muestra de datos:

 

D1 (1.2) D2 (1.25) D3 (1.21) D4 (1.22) D5 (1.33)

 

Asumamos que son los últimos cinco precios (5 días de negociación) de cierta acción. La media móvil simple es la más sencilla. Digamos que queremos calcular la media móvil con factor n=3, es decir, de los últimos 3 días contando el presente. Se calculan los “puntos”, así:

 

MMS1 = (D5 + D4 + D3) / 3

MMS2 = (D4 + D3 + D2) / 3

MMS3 = (D3 + D2 + D1) / 3

MMS4 no aplica

MMS5 no aplica

 

¿Qué pasó en este caso con los datos 4 y 5? No se puede hacer una media móvil n=3 porque no se cuenta con 3 datos históricos hacia atrás para el día 2 ni para el 1, por lo que tendríamos una curva de 3 datos, que se debe graficar al tiempo con la de los datos normales. Ojo a lo siguiente, por lo general siempre se cuenta con datos suficientes del pasado para graficar la curva, sólo que para el ejemplo era la muestra más respetable para que vean en qué consiste.

 

A menos que sea una acción demasiado volátil, y con eso hablamos de variaciones de 20% al día (penny stocks, por ejemplo), siempre se va a suavizar la curva, y entre mayor sea el 'n' que calculamos, más aún. Eso es la media móvil simple, una curva de promedios que va cambiando a cada paso, en este caso en el tiempo. En resumen, el promedio de los últimos ‘n’ días, desde cierto día.

 

La media ponderada se calcula de igual manera, pero se le da cierto peso o ponderación a algunos datos, ya sea a los más antiguos o los más recientes, pero recientes por lo general. Utilizando el mismo ejemplo de datos de la simple, el cálculo sería así:

 

MMP1 = (0.5 x D5 + 0.3 x D4 + 0.2 x D3) / 3

MMP2 = (0.5 x D4 + 0.3 x D3 + 0.2 x D2) / 3

MMP3 = (0.5 x D3 + 0.3 x D2 + 0.2 x D1) / 3

MMP4 no aplica

MMP5 no aplica

 

Resulta que decidí, para el ejemplo, darle más peso siempre al último día de negociación, donde para mí la importancia es de 50%, y el día anterior a ese es de 30% y el anterior inmediato es de 20%. Con eso le estoy dando un mayor peso de decisión a los días recientes. La idea es que sea lineal, es decir, que sea cada vez más importante el día más reciente con respecto a los anteriores, pero eso depende de lo que cada quien quiere saber sobre la acción. Eso es la media móvil ponderada, donde no todos los días pesan igual.

 

La media móvil exponencial es una media móvil ponderada donde el comportamiento no es lineal sino exponencial, es decir, vale muchísimo más el precio más reciente que el último de la muestra, como haber tomado por ejemplo 60%, 25% y 15% como pesos. A la media móvil exponencial le importa en gran medida el presente reciente de la acción.

 

Las medias móviles se suelen calcular con promedios de al menos los últimos 50 días, donde se suaviza muchísimo la curva para nosotros ver en realidad si la tendencia es a subida o bajada, independientemente de los movimientos diarios. Por fortuna estos cálculos no los tienen que hacer ustedes, los portales que siempre les he mencionado ya lo dibujan, pero quería que entendieran de dónde sale esa curva cuando la ven.

 

Ahora bien, ¿para qué me sirve la media móvil? Comencemos por saber cuáles son los ‘n’ más investigados. Se suele calcular la media móvil de 50, 100 y 200 días para las tendencias a corto, mediano y largo plazo respectivamente. Esas tres las pueden ver en el dibujo abajo, junto con la de valores diarios. Primer consejo a saber: no siempre las tres tendencias están iguales. Puede ser que una acción haya subido a largo plazo pero haya bajado a corto plazo, como es el caso que les muestro, de Tesla Motors. Observen como la tendencia a largo plazo sigue firme en subida mientras que la de corto plazo bajó hace unos meses abruptamente. ¿Cuál de ustedes no se asustaba a esa bajada? En especial con precios sin suavizar, creo que ninguno, pero es por eso que hay que tener en cuenta todos los datos posibles.

 

El segundo consejo a saber es lo que llaman «el rompimiento de oro«. Esto ocurre cuando el precio está por debajo de la media de 200. Si las curvas (precio diario y MMS 200) se «cortan» por una subida del precio diario y pasan la media larga, es momento de comprar, con cautela, eso sí. También al contrario, si se cortan en bajada, es momento de salirse.

 

Y el último consejo es el más obvio, pero el más letal. Si las 3 medias están en subida, pero llevan mucho tiempo así: si la media de 50 corta a la de 100 o la media de 100 corta a la de 200, es momento de vender, nada de esperanzas. Son consejos, observación, no ley.

 

Espero que haya estado sencillo. Les iba a hablar sobre bandas de Bollinger pero quedaba muy largo el escrito y es mejor que indaguen más sobre esta medida y en el siguiente artículo sí leemos sobre otros temas relacionados.

 

Comentarios, críticas, ideas en @elmandelabolsa. Hasta pronto.