Con el AC Hotel Bogotá, Marriott  incursiona en la Calle 85 de Bogotá. Espacios colaborativos, concepto fresco y una oferta gastro im-per-di-ble. oxoHotel, el operador.

Marcela Steffens, gerente general, AC Hotel Bogotá Zona T (Foto Frezh)


Hacía años que no llegaba un nuevo hotel a la Zona T de Bogotá. Un área palpitante que combina placer y negocios, rumba y gastronomía, compras y espectáculos. Allí, en plena 85 con 12, edificaron un AC Hotel. Y está dando de qué hablar.

Empezando por su arquitectura, que combina una fachada flotante, un roof top genial de 360 grados y un enorme cubo con la marca AC Hotels que puede verse a kilómetros de distancia.

Le sigue su oferta gastro, con un restorán, el AC Kitchen, que combina platillos de especialidad española con ingredientes colombianos, así como un AC Store, una esquina con snacks, vinos, cerveza y bocadillos, al ladito del front desk.

De complemento, un lobby-bar vacanísimo que lleva por nombre AC Lounge. Allí, es posible tener una reunión de negocios, tomarse un gin-tonic en el balcón o trabajar a cualquier hora en un espacio de coworking repleto de genialidades.

ANTONIO CATALÁN, EL INVENTOR

Si no conoces esta nueva marca de Marriott International, te cuento: nació bajo la visión del hotelero español Antonio Catalán, quien le imprimió a cada propiedad un estilo sofisticado pero sin pretensiones. Una gama de hoteles con fuerte inclinación local para viajeros que llegan de todas partes del mundo.

«Una gama de hoteles con fuerte inclinación local para viajeros que llegan de todas partes del mundo.»

“Está diseñado para los espíritus creativos, viajeros modernos y emprendedores que conectan con el alma de la capital”, según lo describe Marcela Steffens, la primera gerente general de la propiedad, cuyo nombre completo es AC Hotel Bogotá Zona T.

La oferta es inteligente y con tendencia marketera. A los huéspedes se les llama ‘curadores’, mientras que el lifestyle domina la escena, del bar a los dormitorios. Es parte del lema ‘new way to hotel’, que creó Catalán y que impregna los muros, pisos y rincones de esta nueva construcción, tan llamativa como armoniosa.

Son 83 habitaciones repartidas en 56 Deluxe King, 19 Deluxe Twin, 7 Grand Deluxe y una Suite de 71 metros cuadrados.

Para Jorge Estrada, presidente de Ícono Urbano, el principal inversionista y desarrollador inmobiliario, el proyecto tiene un diseño funcional y moderno donde el arte es la identidad. «Buscamos convertir los espacios interiores en ambientes lúdicos”. A fe que puede lograrlo, dada la calidad y cantidad de espacios disponibles para la creatividad.

Steffens, quien cumplió un año en el pre-opening stage del hotel, pretende que el AC Lounge se convierta en una atracción magnética de la Zona T, un área bogotana caracterizada por su vida nocturna, llena de comercios y cultura metro.

El acceso al lobby, saliendo de los elevadores, tiene un puente. Allí se instalará una galería permanente de obras de arte y fotografías, dice.

La ubicación es un hit, sin ser prepotente ni venirse a más. Es un hotel que se va a mover muy bien los fines de semana, un talón de Aquiles para hotelería capitalina.

Es una propiedad que te conecta con la zona. «Desde su cubierta se ve el alcance de Bogotá y el hotel te conecta con ella», remata Steffens. «Si quieres entender la cultura y emoción de la Zona T y sus alrededores, tienes que quedarte aquí.»

Si te preguntas por la inversión, fue de USD15 millones. La operación está a cargo de oxoHotel, una organización colombiana que, con este, ya completó el hotel número 22.

Un hito grandioso para una operadora que lleva apenas 10 años en el mercado.

 


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