Han pasado tres años y medio luego de la aparición del Moto G original, un terminal que se dio el lujo de ridiculizar a toda la industria gracias a que se vendía por menos de USD$200 e incluía un montón de innovaciones que solo se encontraban en teléfonos de alta gama.

La nueva versión Moto G5 Plus no es diferente. Especialmente porque Lenovo decidió de una vez por todas eliminar el plástico y en su reemplazo dotarlo de aluminio cepillado, una medida que marcará sin dudas la tendencia en materiales de próximos los años.

“El aluminio es algo realmente raro en un teléfono del mercado medio”, exclamó un representante de la marca en la tienda Falabella del centro comercial Villa Country en Barranquilla. Tiene toda la razón, ya que desde sus inicios los fabricantes se han empeñado en ensamblar la gama media con horribles carcasas plásticas, cosa que demerita la calidad final y da la sensación de estar manejando un juguete barato.

PANTALLA Y FOTOS

A diferencia del Moto G4 Plus –que vino en 5.5 pulgadas- el nuevo Moto G5 Plus redujo su pantalla a 5.2 pulgadas. La diferencia en visibilidad casi ni se nota y en cambio ganó en maniobrabilidad.

Es un panel Full HD a 1080p que brinda buen nivel de detalle en gráficas y gran legibilidad de textos. Las películas se ven con negros profundos y colores precisos.

Su nuevo bisel circundante de aluminio brinda dos beneficios: buen grip y manejo cómodo con una sola mano.

La cámara principal de 12 megapíxeles presente en el Moto G5 Plus parece un retroceso si la comparamos con la del Moto G4 Plus –que viene con 16 MP.

Sin embargo, trae algunas mejoras incluyendo una iluminación más precisa, la captura de píxeles más grandes y una reducción en el ruido. Súmele la grabación en video a 4K y obtenemos una experiencia brillante muy superior a otros modelos de su categoría.

LECTOR DE HUELLAS

Ya no es necesario recordar contraseñas ni gestos de acceso ya que incorpora un escáner de huellas dactilares que desbloquea el teléfono con solo colocar la yema sobre su superficie.

También da acceso a actualizaciones y sirve para navegar. Por ejemplo, para revisar las notificaciones ya no es necesario desbloquear el terminal. Simplemente se da un toquecito sobre el botón para ver las novedades y luego deslizarse a la derecha para responder.

Algo similar sucede con la navegación: una vez activado, los tradicionales botones capacitivos de Android desaparecen y quedan bajo el control de este sensor. A la izquierda para ir atrás, a la derecha para apps recientes y un toque en el lector para ir a inicio.

DESEMPEÑO

Para no ahondar mucho en aspectos técnicos y aburridores, puedo decirles que el Moto G5 Plus no tiene punto de comparación con el Moto G4 Plus. El terminal que recibí para pruebas traía 32 GB de memoria RAM, una capacidad que se está volviendo un estándar para teléfonos de este precio.

Estuve usándolo por una semana y me impactó la duración de la batería: su carga me aguantó para una jornada laboral.

Además, viene con TurboPower, una tecnología que recarga la batería en un santiamén: con solo 15 minutos conectado a la pared, el celular queda cargado en un 20%. Algo realmente fantástico para un terminal de este precio.

ANDROID «CASI PURO»

Lenovo se ha preocupado porque sus teléfonos Moto vengan casi limpios de aplicaciones inútiles (conocidas como bloatware) que engordan la memoria, consumen recursos y no pueden borrarse. Digo “casi” ya que trae algunas funciones personalizadas como el golpe de karate para encender la linterna o el giro de muñeca para activar la cámara.

Venir libre de impurezas le confiere además gran fluidez entre aplicaciones. En mis pruebas no experimenté ninguna ralentización ni titubeo al desplazarme entre aplicaciones o juegos.

A pesar de que muchos terminales de última generación traen el conector USB-C (incluyendo al Moto Z), el Moto G5 Plus aún sigue usando la interfaz micro USB. Esto podría deberse a que Lenovo tal vez no quiere complicarle la vida a sus al obligarlos a cambiar sus cargadores y cables.

Su precio de COP$899.990 (USD$300) para la versión de 32GB lo mantiene dentro de la categoría de su predecesor que –en su momento- tuvo precio más caro: COP$999.00 (USD$338)

Mientras la industria móvil vive una intensa batalla en la gama alta con celulares emperifollados y súper costosos, Lenovo ha venido trabajando muy calladita y con paso firme ganando cada vez más terreno en las gamas popular y media con terminales bien equipados y al precio justo.