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Aveva, fabricante de software para operaciones e ingeniería de industrias, considera que este es el momento adecuado para transformarse digitalmente.

Adriana Rivero, Aveva.


Las compañías manufactureras encaran diversos desafíos para dejar de ser análogas y volver más digitales. En ese camino, descubren que para aumentar

la eficiencia operativa y maximizar la colaboración entre los equipos de trabajo se requiere un mayor grado de automatización.

Al mismo tiempo, las fábricas deben entregar proyectos con procesos integrados de diseño, simulación e ingeniería, en los cuales los gastos de capital y el riesgo deben ser ajustados al milímetro.

Para hablar de tema, invité a Adriana Rivero, gerente de ventas Suramérica de Aveva, un fabricante de software industrial que optimizan la ingeniería, las operaciones y el desempeño.

Ante la situación que vivimos por la expansión de la pandemia, las organizaciones se preguntan ¿cómo desarrollar una estrategia para volverse más resilientes?

La resiliencia no solo se refiere a tener la capacidad de sobreponerse sino a adaptarnos a un nuevo estilo de vida. Nosotros lo miramos en tres ámbitos: 1) El trabajador para que pudiera continuar su labor de manera remota; 2) La tecnología para hacer este trabajo y tener la información disponible para toma de decisiones; y, 3) La economía en su continuidad y reactivación para ser más efectivos en llevar las tecnologías que requieren las empresas. En este sentido, la transformación digital se aceleró de cierta manera.

¿Cuáles industrias han avanzando más en transformación digital y qué deben tener en cuenta para seguir adoptando la digitalización?

Es una curva en la cual, dependiendo el sector, hay algunas más avanzadas mientras que otras están en este camino, por lo cual depende de cada cliente. En general, vemos que tomó la delantera el sector financiero, por el alto volumen de datos, la disponibilidad de nuevos servicios digitales y por ser el canal para llevar los programas de subsidios. En segundo lugar, está energía y oil y gas, que había iniciado procesos de transformación con áreas robotizadas, uso de analítica en exploraciones y perforaciones. En tercer lugar, están las empresas manufactureras que han automatizado varios procesos y tienen también áreas robotizadas.

En un evento reciente de Aveva, Usted participó hablando sobre el panorama de Latinoamérica, ¿Cómo ve el desarrollo de la región en el uso de automatización industrial, inteligencia artificial y transformación digital?

Los países de la región han estado golpeados. Fuimos los últimos en la ola, tanto en Colombia, Chile, Perú y Argentina, y vemos el impacto en la economía y el empleo. Para la industria no ha sido fácil y el PIB refleja esa realidad. La industria está tratando de apalancarse en TI y su recuperación no será tan rápida, pero confiamos en que a mediados del 2021 la industria esté mucho mejor. Con el uso de aplicaciones Internet de las Cosas (IoT), Inteligencia Artificial (IA) y otras tecnologías, las empresas podrán tener una visión completa de sus áreas de producción, piso de planta y disminuir costos de mantenimiento. Vemos que en la industria minera regional, hay inversión, en temas como analítica predictiva, para lograr mantener eficiencia de activos y mantener lo que tenemos, para alargar el ciclo de vida y con herramientas predictivas.

¿Cuáles son las tendencias de inversión en tecnología?

A raíz de esta crisis mundial, en tendencias vemos que el foco será invertir en tecnología que ayude al tema de supervisión de sistemas robotizados, automatización y centralizar la gestión.

¿Cómo automatizar fabricas análogas a digitales?

A través de IoT industrial. Son procesos largos pero necesarios, pues tenemos pisos de planta análogos, lo cual resta agilidad a los procesos; pero con sensores se puede extraer información y llevar esos datos a la nube.

¿Cómo funciona el Retorno de la Inversión (ROI) en este tipo de procesos?

Ha habido un gran cambio. Tenemos dos tipos de industrias. Las entidades  gubernamentales suelen ser dueños de las cosas, por su concepto de adquisición y mantenimiento acorde con la asignación de sus presupuestos. Para ellos ha sido un poco más difícil migrar a modelos de suscripción. Al contrario, la industria privada apetece más el pago por uso, a la medida de sus necesidades, porque ellos tienen contabilizado el ROI en el tiempo.

¿Qué tanto participa Aveva en proyectos de nube y Big Data?

Cada vez participamos más. Tenemos una plataforma de nube para ingeniería, contamos con herramientas de diseño de instrumentación, utilizamos 3D y cada vez más empleamos la nube para alojar y procesar información en la nube de administración, por ejemplo de la operación de las refinerías.

¿Cómo es su relación con Schneider Electric?

Es nuestro principal socio global. Trabajamos de la mano y las ofertas son complementarias. Dado su enfoque en centros de datos, por ejemplo, les brindamos plataformas para supervisión desde el edificio hasta los datos. Hemos hecho varios proyectos e iniciativas conjuntos para entidades de gobierno y acciones con RutaN, entre otras.

Hablemos de los resultados de Aveva en la región de Latinoamérica. ¿Creció este año o sintió un impacto negativo ante la pandemia?

Nuestro año fiscal finaliza en marzo y pese a situación, nos ha ido bien, pues hemos podido apoyar a los clientes en su continuidad de operaciones. Latinoamérica ha cumplido sus metas y seguimos innovando en productos y servicios para la industria. Esperamos seguir creciendo en 2021.


 

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