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Por: CP Alexander Camargo M.  CEO de C&G Auditores y Consultores Ltda. Colaborador de Auditool

Nuestra economía y, por ende el de las empresas, han enfrentado una de las mayores crisis, la cual ha retado la capacidad de resiliencia de nuestros empresarios. Ante la rápida transformación y la disrupción digital que se ha enfrentado; quizás, uno de los más grandes riesgos que tienen las organizaciones hoy en día, incluso mayor que la pandemia, es el fracaso para innovar.

Las organizaciones se enfrentan cada vez más al desafío de innovar en productos, servicios, canales de entrega, precios y modelos de negocio para satisfacer las demandas de los clientes. Sin embargo, con demasiada frecuencia, el riesgo y el cumplimiento se perciben en muchas organizaciones como obstáculos para la innovación y el crecimiento.

Las empresas deben tener la actitud y el enfoque correctos en toda la cultura empresarial, la estrategia y su estructura organizativa, de tal forma que se apoye la innovación y se permita el cambio mientras se protegen contra el riesgo.

En muchas organizaciones la gestión de riesgo y cumplimiento se entienden como “la función del no», por lo que es necesario una modernización de la gestión de riesgos y el cumplimiento para permitir el éxito, alineándolos de forma proactiva con la estrategia empresarial.

Aspectos clave para permitir la Innovación gestionando adecuadamente el riesgo

Solidez en la cultura de gestión de riesgos

Una sólida cultura de gestión de riesgos y cumplimiento es aquella que permite y fomenta la comunicación y la colaboración, en donde las líneas de negocios, los equipos de desarrollo, los ingenieros, los departamentos de cumplimiento y las operaciones de back-office están trabajando hacia un objetivo común.

Este tipo de cultura se define por las acciones de quienes se encuentran en la parte superior de la organización, ya que los líderes de la empresa deben establecer una expectativa de que la administración de riesgos corre paralela a todas las iniciativas de la compañía.

La estrategia, debe incluir gestión de riesgos

Las empresas pueden comenzar a formar un enfoque más sistemático para la innovación de gestión de riesgos mediante la incorporación de la priorización formal de riesgos en los objetivos, estrategias y presupuestos de la organización.

Para lograr la innovación, las organizaciones tienen que tomar algunos riesgos. Los miembros de la junta y la alta gerencia deben establecer límites de riesgos y articular claramente un nivel de margen de maniobra que los empleados tienen para probar estos límites.

Las consideraciones de gestión de riesgos deben ser fundamentales en la planificación estratégica, en lugar de abordarse al final. Habilitar el riesgo y el cumplimiento en la planificación estratégica puede ayudar a ilustrar cualquier riesgo o aspecto de cumplimiento de nuevos productos y servicios.

Cumplir con las normas y regulaciones relevantes puede impulsar mejores resultados de los clientes y oportunidades de crecimiento.

Las organizaciones deben aprovechar el poder de esta ventaja competitiva, en lugar de ver el cumplimiento simplemente como una línea de base.

Alineación organizacional

Una organización creada para facilitar la innovación gestionada por el riesgo tiene: roles, responsabilidades definidas y el modelo de las tres líneas de defensa, el cual se estructura de la siguiente manera:

  • Línea de negocio
  • Riesgo y cumplimiento
  • Auditoría interna

Las personas deben tener roles y responsabilidades claramente identificadas orientadas a transformar las ofertas y actividades comerciales, centrándose en la innovación y la gestión de riesgos.

Tener un programa de capacitación ágil y flexible permite a las organizaciones capacitar rápidamente a los miembros del equipo según sea necesario a partir de la colaboración de personal diverso.

La línea de negocios, gestión de riesgos y la auditoría interna, deben trabajar juntas de manera coordinada para gestionar los riesgos sin duplicar esfuerzos. Un documento que presenta el plan puede ayudar a alinear a todas las partes en torno a las metas y objetivos.

Las organizaciones deben integrar las mejoras de la gestión de riesgos en las prácticas existentes para prepararse futuros cambios en los riesgos y regulaciones

Establecer estándares de habilitación de cambio.

Las empresas deben crear un “libro de jugadas” para la innovación y el cambio que incluya las actividades necesarias para comprender el riesgo asociado, las actividades operativas necesarias y los controles necesarios para la ejecución.

Crear un equipo de empleados con un conjunto diverso de habilidades, experiencia y antecedentes, posicionará mejor a la compañía para responder según sea necesario el cambio.

Tener planes implementados que definan las necesidades organizacionales relacionadas con las iniciativas de cambio mejorará la agilidad.

Estos programas deben diseñarse para crear un entorno seguro que permita el fracaso en la búsqueda de innovación.

 

 

CP Alexander Camargo M

Contador Público, CFCS “Especialista Certificado en delitos financieros”, Especialista en Control Interno de la Universidad Militar Nueva Granada, con Maestría en Gestión Integral del Riesgo de la Universidad Externado de Colombia (Pendiente Tesis). Con más de 25 años de experiencia en procesos de aseguramiento y consulta en empresas de diferentes sectores de la economía, adquirida en firmas internacionales de auditoría, KPMG y CROWE. Actualmente CEO de C&G Auditores y Consultores Ltda.

www.auditorescyg.com

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