Bailo cualquier ritmo, cuente conmigo

Es muy conocido el refrán que dice “ Al son que me toquen bailo”

Una amigo colombiano me decía que como gerente de recursos humanos que había sido por muchos años en una multinacional, le había llevado a la fiesta de los diciembres de la compañía bandas de rock cuando hubo un Ingles como Gerente General, luego había llegado un español y le llevaba tunas universitarias, luego llegó como gerente general un mexicano y en consecuencia le llevaba mariachis y al último que era colombiano de una región llamada Boyacá le llevaba la música de esa zona que es la carranga. Como cada gerente duraba en su cargo entre 4 y 6 años, el amigo decía haber durado en su cargo 20 años gracias a hacer bien su trabajo y sobre todo gracias a haber agradando a los gerentes, según a cada uno le gustaba.

Otro amigo que llevaba en una multinacional muy estricta y famosa por echar mucha gente a la calle cada  año, llevaba 35 años trabajando y siempre le iba bien. Le pregunté a qué atribuía su éxito de permanencia y en una muy breve respuesta me dio su fórmula mágica “Cada vez que anuncian un cambio de directrices o estrategias yo me postulo para ser parte del equipo que las lidera”.

La velocidad de adaptación o reacción a nuevas condiciones o a cambios extremos es el primer factor clave de éxito para sobrevivir y el segundo es tener la voluntad de adaptarse o de querer leer y entender las nuevas condiciones, asunto que no es fácil para muchas personas.

Todos hemos escuchado las historias de gente que ha sobrevivido naufragios o que sale viva después de caer un avión en una selva o en montañas llenas de nieve, o salir viva de un desierto o salvarse en un terremoto, o de un incendio o de un accidente, esas no son solamente casualidades o buena suerte, son la aplicación inteligente de la capacidad de adaptación que se pueda tener a las condiciones sorpresa o impredecibles y en eso la voluntad y la velocidad son vitales, aparte del ingenio o creatividad.

Todo se puede explicar en forma sencilla con un ejemplo que es el del viajero frecuente que vuela de américa al lejano oriente y en menos de 24 horas se encuentra en otras condiciones horarias, otro clima, otra cultura, otras costumbres, otras reglas, otras leyes, otra comida, otro tipo de gente etc. ¿Qué hay que hacer, si quiere sobrevivir en las nuevas condiciones al estar en el extranjero?…Adaptarse cuanto antes y disfrutar el cambio…¿Tiene sentido común?…Desde luego uno puede decidir que no se adapta, pero eso le va a costar o le va a doler porque algo no va a conseguir o algo no va a salir como le gusta o alguna infracción va a cometer y va a tener que sufrir las consecuencias.

El mundo no está hecho a nuestra imagen y semejanza o en otras palabras el mundo no se adapta a nosotros, somos nosotros los que podemos adaptarnos al mundo. De todas maneras es una decisión y una elección que está en nuestras manos y somos libres de hacer lo que queramos.

Yo solo dejo la reflexión.

En un incendio en un piso 50 de un edificio, si uno está allí en ese piso, uno puede optar por quedarse quieto y no hacer nada o puede pensar rápido y en forma serena buscar una opción para salvarse, igual puede sencillamente desmayarse y quemarse o tener la suerte que alguien más se lo eche al hombro y lo salve. ¿Qué opción prefiere? ¿Le interesa salir vivo?

El problema la mayoría de las veces es que el universo nos coloca una música o un ritmo para que bailemos y estamos lo suficientemente distraídos que no lo escuchamos o si lo escuchamos nos quedamos sentados y no lo bailamos. Después nos preguntamos, ¿Que nos pasa? ¿Por qué todo me sale mal?

Recuerdo mis padres cuando uno les proponía salir a hacer una vuelta, o salir a cenar o ir de paseo, no vacilaban en decir que si y si había que cambiarse lo hacían en minutos o alistar maleta no era un inconveniente porque lo hacían en menos de una hora para estar  listos, como los Boy Scout, “Siempre listos”. Una gran capacidad de adaptación porque tenían la voluntad permanente y la velocidad. ¿Cuanto se demora Usted en alistarse para salir a una invitación instantánea?

Pase lo que pase uno tiene que bailar al ritmo de la música que la vida le ponga y si logramos adaptarnos rápido a esa nueva música o a ese nuevo ritmo y bailamos, el universo estará a nuestro favor, no le quepa la menor duda.

Por eso..Bailo cualquier ritmo !cuente conmigo!