Direccionamiento estratégico desde el enfoque de gestión integral
Actualmente, se viene trabajando desde el ámbito teórico como hacer las organizaciones mas productivas para la sociedad, la comunidad, los socios, el Estado y los trabajadores.
Esta abstracción de la realidad, implica desde un mundo cambiante, hacer que las estructuras que se de a las organizaciones sean flexibles y adecuada para que esta pueda cumplir con sus objetivos y metas a corto y largo plazo, garantizando su permanencia en el tiempo, pudiendo dar respuesta al medio al inmediato plazo.
Podemos conceptuar entonces que el sistema de Gestión integral es la estructura que se da a la organización para que esta pueda desarrollar su labor presente en función del cumplimiento de la misión con perspectivas de la Visión.
En la economía clásica se hablaba de la especialización del trabajo como la herramienta para alcanzar la mayor productividad, sin embargo, en el entorno moderno he detectado que la mejor forma de obtener la eficiencia y eficacia en la productividad, lejos de la especialización, se encuentra en la integración de procesos, en la integralidad de las personas y en las soluciones integrales.
El enfoque utiliza el concepto de integralidad como parte activa de las organizaciones modernas, en función de la optimización de los recursos físicos, financieros, tecnológicos y la potenciación del recurso humano.
No es solo logar la minimización de los recursos y que se maximicen las utilidades, el enfoque es mucho mas complejo.
Cada grupo dentro de una organización cumple una serie de funciones, se trata que dentro de la armonía y secuencialidad, se involucre los intereses, perspectivas, formas de solucionar problemas, para que cada grupo actúe como parte de un todo y esta suma de grupos no sea simplemente una adición de esfuerzos sino un sistema integrado que apunte al desarrollo de los objetivos creando una cultura para toda la organización.
Esta cultura incide directamente como todos los integrantes del grupo y cada grupo interactúan de forma tal que este mencionado comportamiento se traduzca en estrategias, cuyo funcionamiento genera cadenas de valor para la empresa y para si mismos.
Los sistemas de Gestión tradicionalmente se encuentran organizados según el área de acción dentro de la organización, es decir, según el area de responsabilidad: administrativa, financiera, producción y Calidad, mercadeo y ventas; etc.
Si embargo, la realidad es mucho mas compleja y cambiante, exige, que se adapte permanentemente al cambio y la tendencia es la optimización de los recursos disponibles, pues sería inviable, la búsqueda de dichos recursos externos cada vez que se incorporen nuevos actores o tecnologías al mercado.
Solo es viable para una organización implementar un sistema de gestión, donde se asegure un sistema para todos los macroprocesos, donde se aseguren unos objetivos y metas organizacionales, y el cuál se mueva en busca de objetivos comunes por métodos comunes y no como esfuerzos aislados como ruedas independientes dentro de la misma organización. Esto genera cultura organizacional.
Esta cadena de valor, debemos tenerla en permanente evaluación, teniendo en cuenta que siempre hay una mejor forma de hacer las cosas, mirando hacia afuera de la organización y no mirar solo hacia el interior, para el permanente aprendizaje de todos sus integrantes y sobre todo de los líderes, por lo que los aportes, la experiencia, la comunicación se vuelven pieza clave para el logro de los objetivos.
Esto nos lleva a la importancia del trabajo entre equipos y en equipo.
Este enfoque, nos propone un sistema de planeación, monitoreo y evaluación que exige un liderazgo proactivo que involucre todos los niveles de la organización, con una visión compartida que involucre la gente y cree un ambiente de auto control y de trabajo coordinado y que satisfaga las pretensiones de cada uno de sus integrantes, generando una cadena de valor que se reflejará en el entorno, para sus clientes y la comunidad en general.
Esta capacidad de respuesta al medio cambiante, nos permite convertir las amenazas en oportunidades y las debilidades en fortalezas.
Para el caso colombiano, esta perspectiva aporta grandemente a las organizaciones, en el sentido que la mayoría de empresas, sobre todo las públicas son de carácter muy rígido.
Vemos como existen entidades que funcionan como hace varias décadas de la misma manera.
Hoy en día se requiere una rápida acción de las entidades públicas para el logro de sus objetivos y dar respuesta inmediata a las necesidades de la comunidad, pero el apego al proceso, procedimiento del manual demora la respuesta, por lo que estas entidades que no se modernicen están condenadas a desaparecer.
DIEGO OLIVEROS
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