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“Sueños de camino”, Foto autoría propia Páramo De Santander, marzo 2021.

-La recomendación es que salgan a eso de las cuatro a cinco de la mañana,

es preferible que cuando lleguen al Paramo, los coja el día y no la noche,

porque si eso pasa eso sí que es complicado…-

Escuchar esas recomendaciones de primera mano, y acompañarlos una mañana de travesía a pasar el punto más crítico, fue que encontré al primer grupo de caminantes, 3 jóvenes que sus edades oscilaban entre los 20 y 29 años, provenientes del Estado Aragua al oriente de Venezuela, era su día 22 de caminata, fue precisamente en este punto a más de 3.310 metros de altura con temperaturas cercanas a los 4 grados Celsius en pleno páramo de Santander. Cuando les pregunté qué los motivaba a dejarlo todo en sus territorios, a unisonó mencionaron – venimos a recibir las ayudas que esta dando el gobierno colombiano, allá no hay nada que hacer, nada que esperar-.

Para los cientos de caracoles que día a día vienen con sus casas a las espaldas y un centenar de sueños en la cabeza, esta es su realidad cotidiana, que de acuerdo con las datos más recientes de migración Colombia y la ACNUR en los últimos años han salido de territorio venezolano más de 5 millones de habitantes, de los cuales el 34% de ellos se encuentran en territorio nacional, y si a eso le sumamos que el 56% de ellos se encuentran en situación de irregularidad sin duda es una realidad poco alentadora, que de seguir la tendencia en poco tiempo superaremos los números de Siria con todo lo que eso implica. (Migración Colombia, 2021).

Añadido a esta situación en plena coyuntura Covid-19, con un país con preocupantes panoramas económicos, sociales y políticos el anuncio del gobierno nacional de presentar el Estatuto Temporal de protección para el migrante venezolano, es un tema que requiere todo el enfoque y atención, pues aunque muy bien sabemos que los problemas se solucionan en el territorio emisor, y no en el territorio receptor, estos intentos obedecen a una obligación moral e histórica que tenemos para con nuestra nación hermana así como un compromiso y responsabilidad por los derechos humanos.

Sin duda alguna el ingreso masivo de una población que según cifras de Migración más del 78% son población en edad de trabajar y pueden llegar a ser económicamente activos, en un panorama de reactivación económica como el que estamos afrontando, tiene que manejarse con responsabilidad y analizando que estas medidas de incentivos van a traer grandes beneficios, como a su vez diferentes retos a superar. Los incentivos del estatuto apuntan que la población migrante pueda obtener inclusión financiera que favorezca a su vez la fiscalización y recaudo, identificación y caracterización de la población que sirva para mejorar el diseño de políticas públicas focalizadas, reglamentación y legalidad entre otros tantos (véase el decreto).

Marzo 2021 – Paramo de Berlín, Santander.

A su vez, este tipo de medidas tienen una respuesta social que en el primer escenario se nos convierte en esa espada de Damocles que nos pone en esa disyuntiva imaginaria y creer que permitir el favorecimiento de unos va en contra  del desmejoramiento de otros, como si la economía en el largo plazo fuera un juego de suma cero, y pocas veces entendemos que de aceptar y entender un poco mejor estas realidades, esta medida va a generar esa necesidad de competencia y emprendimiento que movilice la acción humana en este momento coyuntural en el que sin duda la crisis nos tiene que permitir ayudar a crear, a crecer, a creer.

Pero sin lugar a dudas este estatuto temporal de protección al migrante venezolano, será un multiplicador de confianza que de direccionar sus incentivos de manera eficiente va permitir que para jóvenes como Javier, Eduard y Antony los caminantes de esta mañana les permita que este ejercicio de legalidad se convierta en un ejercicio de libertad, que va permitir que no encuentren las trabas mentales que suele hacernos creer el imaginario colectivo que para vivir debemos de tener y depender de un Estado Protector que vele por nuestras individualidades, que este ejercicio nos lleve a ser conscientes que llegar a un territorio tan complejo como este, y construir una economía para el bien común es mejor cambiar la visión de recibir, por una posición de crear, buen camino muchachos, bienvenidos.

 

Referencias:

Decreto 216 del 1 de marzo del 2021 – Presidencia de la Republica.

ABC Estatuto Temporal de Protección – Migrantes Venezolanos, Migración Colombia.

 

Economista Santiago Adolfo Sequeda Garrido

Egresado Facultad de Economía Universidad Santo Tomás – Seccional Bucaramanga

Candidato a Magister en Políticas Públicas y Desarrollo – UNAB

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