Ejemplo de inversión tecnológica errónea

Hace un par de años participaba en un evento de Networking. En este tipo de eventos se conoce y se habla con mucha gente, entre tantas personas acabé hablando con alguien, y en concreto sobre nuestras soluciones CRM ERP.

La conversación avanzaba y esta persona tomaba cada vez más interés en las prestaciones que una herramienta de este tipo podía aportarle. Cuanto más le contaba más le interesaba y así continuó la conversación hasta que me dijo algo que a fecha de hoy no he podido olvidar.

         .- Es que hace cuatro meses me compré un sistema de gestión de la calidad y hasta que no acabe de pagarlo no puedo afrontar una nueva inversión…

Lo cierto es que no daba crédito a lo que estaba oyendo. Cuando yo le iba comentando las funcionalidades que un CRM ERP le podía aportar, esta persona me evidenciaba la situación de la empresa, confirmando que un software de gestión le sería muy útil ya que no tenía una aplicación con la que poder facturar o controlar las horas de servicio que prestaba, ni las acciones comerciales sobre sus clientes y leads…..

Por eso su afirmación me cayó como una lápida…

¿Como podía alguien invertir en un sistema de calidad sin tener las necesidades mínimas cubiertas?

Si bien era una pregunta que me costaba responder, es algo que todavía puedo comprender.

Los empresarios, los ejecutivos… no son especialistas en tecnología, y todos podemos equivocarnos.

Lo que si que a día de hoy no he podido comprender es como alguien, que SÍ es profesional de la tecnología tuvo el valor de realizar esa venta… es como si yo le vendiera a una empresa una remesa de gafas de Google sabiendo que no tienen antivirus…

Es evitar este tipo de errores y situaciones lo que pretendo en este blog.

Invirtamos en tecnología, pero hagámoslo con conocimiento de causa y de manera escalable, dando solución en primer lugar a las necesidades primarias y a partir de ahí continuar creciendo.