La vida es un continuo aprendizaje.
Hoy todos estamos aprendiendo.
Estamos aprendiendo a reinventarnos como empresas, como familias y como seres humanos.
La evolución de la humanidad ha mostrado una tendencia creciente hacia una mayor relación entre los seres humanos y hacia sociedades más grandes y con un nivel de integración más complejo.
Decimos con orgullo:
«Ahora somos habitantes del mundo».
De un momento a otro, el temor a morir nos obliga a NO salir de nuestros hogares.
Es un cambio de tendencia radical,
que obviamente nos afectará en todos los aspectos.
Pero bueno, entremos en materia económica, relacionada hoy con los mayores plazos ofrecidos por la banca y el Estado.
Me genera tranquilidad
el apoyo mostrado hasta ahora por parte del sector financiero.
La mayoría de los bancos ya se han manifestado formalmente con comunicados haciendo referencia a mayores plazos, lo cual seguro aliviará los flujos de caja de empresas y familias afectadas por esta emergencia de la salud.
Es muy importante que los alivios finales no sean solo de mayores plazos, sino que vayan
también acompañados de menores tasas.
Soy optimista de que así será.
Es importante tener siempre presente que un crédito costoso debe pagarse lo más pronto posible, y un crédito barato no hay afán de pagarlo rápidamente. Obviamente estas decisiones dependen también del costo de oportunidad de cada uno.
En este orden de ideas, recomiendo tener la debida precaución cuando se negocien las innumerables refinanciaciones de créditos que se avecinan,
buscando privilegiar pactar mejores tasas, frente a lograr obtener mayores plazos.
De igual manera el gobierno ha aplazado las fechas de pago de impuestos y de cobros relacionados con empresas y entidades públicas.
Es fundamental un tratamiento financiero posterior benévolo de estos aplazamientos, frente a posibles tasas de interés y sus correspondientes condiciones de plazo.
La recuperación de la economía será probablemente en el
segundo semestre de 2020 y será progresiva.
Las empresas requerirán de tiempo para reponerse y encontrar nuevamente sus estrategias de crecimiento y viabilidad financiera de largo plazo, para lo cual es fundamental que sus pasivos se estructuren de la mejor manera posible.
Tengo la plena seguridad que esta crisis nos hará
crecer como empresas, como familias y como seres humanos.
Las empresas siempre han existido y seguirán existiendo.
Hermann Stangl
Fusiones y Adquisiciones
info@stangl.com.co
#SiempreEmpresas
Cordial saludo Hermman. Muy de acuerdo con tu columna. Como empresario también pase tiempos difíciles en la crisis del 2008-2009. Escribi algo que quisiera compartirte.
https://encontrario.com/carta-empresario-momentos-de-crisis-economica/
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De acuerdo, la idea es ahora prepararnos y reinventarnos, gracias por tu comentario Nathanel
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