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Para muchos el estrés se ha convertido en parte cotidiana de la vida. No obstante, es una de las causas más importantes de enfermedad y muerte en el mundo moderno. El estrés afecta los músculos de la cara y hace que estos se contraigan. El estrés en la cara hace que nos veamos más viejos, con menos energía y con muchas arrugas. La piel se debilita, se vuelve seca, agrietada, aparecen erupciones, acné, manchas, entre otros.
 
Los faciales ayurvédicos restauran el balance de los doshas (vata, pitta y kapha) en la piel de la cara y la cabeza en general. El facial ayurvédico debe ser diseñado específicamente para cada paciente. El profesional debe determinar la duración de cada segmento de la terapia, los mejores aceites herbales para aplicar, el tipo de masaje y la presión ideal. 
 
El procedimiento consiste en la aplicación de masaje exfoliante, masaje con aceite, el manejo de los marmas (puntos de acupresión ayurvédica) en la cara, la aplicación de calor y, finalmente, la aplicación de productos a base de hierbas para el cuidado profundo de la piel. Esta terapia está disponible en una variedad de centros de estética en  Estados Unidos, Europa e India y el interés por esta técnica está creciendo rápidamente en toda Latinoamérica.
 
El facial ayurvédico incluye la estimulación de los puntos marma en la cara. Esto influye en el flujo de energía vital (conocida en Ayurveda como prana) tanto en el cuerpo físico como el cuerpo energético, con el fin de de restablecer la salud y promover la paz mental. La terapia de marma apoya el proceso de remoción de toxinas. 
 
La aplicación regular de un facial ayurvédico apoya la eliminación de toxinas, reduce las líneas y arrugas, y ayuda a que la piel se vea joven y saludable. Es una técnica no invasiva que promueve la belleza profunda y duradera que irradia desde el interior. El facial ayurvédico tiene una duración entre 60 y 90 minutos.
 
Durante el facial ayurvédico se utilizan una variedad de medicinas herbales incluyendo la cúrcuma, el neem, el amalaki y la triphala. El neem es una hierba que ayuda a reparar la piel, es antimicrobiana y es una de las hierbas más poderosas en la farmacia ayurvédica para el tratamiento de la piel. El amalaki es un excelente antioxidante, es una fuente natural de vitamina C, inhibe la inflamación y ayuda a la sanación de las cicatrices.
 
La Escuela de Ayurveda de California ofrece un programa de entrenamiento de faciales ayurvédicos. Este programa es recomendado para profesionales de Ayurveda, terapeutas ayurvédicos, estudiantes de estética y profesionales de la salud. Es una técnica milenaria que es completamente segura y apoya el proceso de sanación ayurvédico. Es un excelente complemento para el masaje ayurvédico (conocido también como abhyanga). El próximo curso se ofrecerá en octubre en la ciudad de Bogotá.
 
Escrito por Santiago Suárez 
Especialista Clínico de Ayurveda
 

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