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“En la actualidad, la tecnología está transformando el mundo del marketing y la publicidad de formas que hace una década eran impensables. Una de las tendencias más importantes en este ámbito es la personalización, que busca adaptar los contenidos y los productos a las necesidades y preferencias de los usuarios”. Ese pensamiento es de mi bloguero invitado de hoy, Carlos Betancur Gálvez, CEO de BTO Digital, una agencia de marketing digital que admiro muchísimo. Acá les comparto el artículo completo:

Carlos Betancur es el CEO de BTO, una empresa de marketing digital. Imagen cortesía.


Pero, ¿cómo logran las empresas hacerlo de manera tan precisa? ¿Es posible que el algoritmo te conozca mejor que tú mismo? En este escrito, exploraremos la relación entre la inteligencia artificial y la personalización, analizando su funcionamiento, su impacto en la publicidad y el marketing.

El funcionamiento de la personalización en la era de la IA

La personalización es un proceso que implica la creación de contenidos y productos que se adaptan a las características y preferencias de cada usuario. En su versión más básica, la personalización se basa en la segmentación, es decir, en la agrupación de usuarios según ciertos criterios demográficos o conductuales, para ofrecerles contenido o productos específicos.

La inteligencia artificial ha permitido llevar la personalización a un nivel mucho más avanzado.

En la actualidad, los algoritmos son capaces de analizar grandes cantidades de datos sobre los usuarios, como su historial de navegación, sus interacciones en redes sociales, sus búsquedas en línea, las compras que hacen, tanto en una tienda virtual como en puntos físicos, entre otros, para identificar patrones de comportamiento y preferencias.

Con esta información, los algoritmos pueden crear perfiles detallados de cada usuario y adaptar los contenidos y productos a sus necesidades y deseos. Esto se conoce como contenidos y recomendaciones de productos con Inteligencia Artificial.

Ejemplos reales de la personalización con IA

Un ejemplo concreto de cómo la personalización con IA está transformando la publicidad y el marketing es el caso de Netflix. La plataforma de streaming utiliza algoritmos para analizar los hábitos de visualización de cada usuario y ofrecer recomendaciones personalizadas de películas y series.

De hecho, se estima que el 80% de los contenidos que los usuarios ven en Netflix son resultado de las recomendaciones personalizadas de la plataforma. El sistema de recomendación de Netflix es tan efectivo que, según la empresa, ha logrado aumentar la retención de usuarios en un 30%.

Otro ejemplo es el de Spotify, que utiliza algoritmos para crear listas de reproducción personalizadas para cada usuario. El algoritmo analiza las canciones que el usuario ha escuchado recientemente, así como sus preferencias en términos de género musical, para crear listas de reproducción que se adapten a sus gustos. Además, Spotify ha lanzado una función de «descubrimiento semanal» que ofrece una lista de 30 canciones nuevas cada semana, adaptadas a las preferencias de cada usuario.

El caso de Amazon es también muy interesante. La compañía utiliza algoritmos de recomendación para sugerir productos que puedan ser de interés para cada usuario, basándose en su historial de compras y en las búsquedas que ha realizado en la plataforma. Este sistema ha sido tan efectivo que, según un estudio de la consultora McKinsey, el 35% de las ventas de Amazon provienen de sus recomendaciones personalizadas.

El impacto de la personalización en el marketing y la publicidad

Más allá de la personalización de los productos, la IA también puede ser utilizada para personalizar la experiencia del usuario en una página web. Las recomendaciones de contenido y las sugerencias de productos son sólo algunas de las formas en que se utiliza la IA para personalizar la experiencia del usuario. Por ejemplo, el algoritmo de YouTube utiliza la IA para sugerir videos y canales que se ajustan a los intereses del usuario.

La IA también se utiliza en los sitios de comercio electrónico para sugerir productos complementarios y personalizados que podrían ser de interés para el usuario. Además, para activar acciones de marketing como correos electrónicos personalizados, mensajes de WhatsApp o SMS y hasta campañas de retargeting en redes sociales.

En resumen, la relación entre el ser humano y la IA en la personalización es compleja y está en constante evolución. Por un lado, la IA puede ayudarnos a personalizar nuestras experiencias en línea y a descubrir productos que podrían ser de nuestro interés.

Por otro lado, existe una preocupación legítima sobre la cantidad de información que estamos entregando a los algoritmos y sobre el grado de control que tenemos sobre nuestras propias decisiones. A medida que la IA se vuelve más avanzada, es probable que estas cuestiones sean aún más importantes.

En última instancia, la relación entre la IA y la personalización es uno de los muchos desafíos que enfrenta la industria del marketing digital. A medida que la tecnología continúa evolucionando, es importante que los profesionales del marketing sean conscientes de las últimas tendencias y desarrollos en IA y que estén preparados para adaptarse a un mundo en constante cambio.


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