Estrategias para liderar el crecimiento desde las finanzas

Por Carlos Faraminan, Multi-Country CFO en SAP.

En un entorno empresarial que combina entornos económicos cambiantes, transformación tecnológica y expectativas sociales cada vez más altas, el liderazgo financiero ya no se limita a equilibrar presupuestos o controlar costos. Hoy, los CFOs están asumiendo un papel más amplio: el de impulsores del crecimiento organizacional. Esta es una de las principales conclusiones del SAP Concur CFO Insights Report 2025, un informe anual que recoge las prioridades y desafíos estratégicos de los líderes financieros en todo el mundo.

Aunque el 90% de los CFOs encuestados afirma sentirse directamente responsable de liderar el crecimiento, solo el 9% cree que esa tarea debe compartirse con el resto del equipo ejecutivo. Esta cifra refleja una paradoja: mientras el crecimiento se consolida como un imperativo colectivo para las organizaciones, aún hay un largo camino por recorrer en términos de colaboración interdisciplinaria.

Los CFOs que amplían su influencia y trabajan en conjunto con otros líderes, particularmente en áreas como TI, operaciones o sostenibilidad, están mejor posicionados para identificar oportunidades y responder con agilidad a los cambios del entorno.

IA y automatización: de la teoría a la práctica

La automatización y la inteligencia artificial han dejado de ser conceptos futuristas para convertirse en prioridades presupuestarias concretas. El 58% de los CFOs ya está aprovechando estas tecnologías para mejorar la eficiencia y optimizar procesos. El salto en adopción es notable: mientras que en 2024 solo el 7% de las tareas generales de oficina estaban automatizadas, en 2025 esa cifra supera el 57%.

Sin embargo, el camino no ha sido inmediato. Las tareas manuales siguen siendo uno de los principales cuellos de botella internos, mencionadas por el 38% de los encuestados, una cifra que contrasta con apenas el 1% registrado en estudios anteriores. La transición hacia modelos de trabajo más automatizados aún enfrenta resistencias y desafíos operativos, pero el avance es claro y constante.

A medida que los entornos digitales se vuelven más complejos, la ciberseguridad se posiciona como un área crítica. Un 59% de los CFOs planea aumentar su presupuesto en esta materia. A pesar de ello, solo uno de cada cinco tiene previsto reforzar la colaboración con el área de TI, lo que revela una posible desconexión entre la intención de proteger a la empresa y la capacidad de ejecutar esa protección de forma integral.

Sostenibilidad como ventaja competitiva

Aunque las discusiones sobre ESG (ambiental, social y gobernanza) han estado marcadas por una creciente polarización, particularmente en mercados como Estados Unidos, los CFOs a nivel global comienzan a ver la sostenibilidad no como una carga regulatoria, sino como una vía para el crecimiento. El 48% afirma que impulsará iniciativas de ESG como parte central de su estrategia empresarial en 2025.

Este cambio de percepción señala una evolución en el rol financiero: no se trata solo de minimizar riesgos, sino de identificar nuevas fuentes de valor en factores que antes eran considerados “intangibles”.

Este tipo de análisis nos muestran que el CFO moderno es más que un guardián de los números. Es un estratega con visión de negocio, un líder de eficiencia operativa y, cada vez más, un agente de cambio dentro de las organizaciones. Precisamente, las prioridades para 2025, como automatización, ciberseguridad, sostenibilidad y colaboración, reflejan este cambio de paradigma.