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La angustia siempre es el resultado de alejarse del ahora.
Fritz Perls

Fritz Perls, sicólogo humanista, interviene el concepto de “el aquí y el ahora”, sacándolo de lo místico y colocándolo en práctica, pues lo necesitamos todos. Nos dolemos y sufrimos por el pasado y nos angustiamos afanadamente por el futuro, restando fuerza y dejando de vivir nuestro presente.

Un terapeuta indicaba como metáfora, que los carros tienen espejos pequeños para ver lo estrictamente necesario de atrás y un panorámico para ver hacia adelante cada paso y momento con toda amplitud. Así mismo, el pasado nos sirve para recobrar esas lecciones aprendidas, por eso usemos los espejos pequeños y miramos por el panorámico con mucho amor, pasión y dedicación cada paso de nuestro aquí y ahora.

Se preguntarán cómo Procultivos ANDI aplica de este concepto. Cuando interactuamos con los productores del campo, en cada acción, actividad, programa o proyecto, acudimos a esta terapia, porque lo único que existe para trabajar es el presente.

Cultivadores de cacao

Concentrarnos en lo que sucede aquí y ahora produce aquella reacción constructivista, libre de angustias que distraen el trabajo integral para evolucionar en los cambios de hábitos, en las buenas prácticas agrícolas, en el uso adecuado e inteligente de las tecnologías, en la mejora de la productividad y en el desempeñarse como empresario, entre otros.

Este tipo de trabajo es real, pero a la vez difícil, porque lo de siempre viene liderando muchos años atrás las mentes, con promesas de lo que vendrá, con ataques de lo que fue, y entre las dos, los productores movidos en sus emociones como veletas a las sicotecnias mentales de muchos intereses ajenos a ellos.

Como Economista y Sicóloga soy una convencida de que trabajar diferente es más complejo, ir al campo, untarse de tierra, llorar y reír con los productores, construir lo supuestamente imposible y encontrar cambios y resultados es algo que podría modificar estructuralmente el desempeño productivo de las cadenas de valor que tanto soñamos, apuntando así hacia un desarrollo sostenible del negocio agrícola.

Víctor Rueda, cacaocultor de San Vicente de Chucurí.

Sigamos adelante, porque hemos visto que los productores del campo que lo logran son imparables con sus aportes económicos, sociales y ambientales, lo cual cambiará la historia de lo que deseamos para el sector agrícola.

Gracias y nos vemos pronto.

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