La semana pasada, en el Congreso Agropecuario Nacional de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), —a propósito, un excelente evento por su nutrido temario y concurrido público interesado en el agro del país— quedó absolutamente claro que el futuro de la economía está en el campo agrícola y, por ende, los desafíos serán logrados con trabajo, perseverancia y, sobre todo, con creencia y amor en lo que tenemos y en lo que podemos hacer.
Un desafío fundamental es la productividad de los cultivos agrícolas. En este sentido, Procultivos ANDI ha logrado pilares de trabajo que aportan al mismo.
- Por ejemplo, en nuestro estudio ‘Construcción de un modelo de agricultura competitiva en Colombia’, se indicó que el factor agua es fundamental para la vida vegetal y, por eso, este blog ha interactuado con expertos en la materia, quienes indican que con gestión de este recurso podremos tener suficiente agua para nuestra agricultura.
- Este estudio, además, priorizó la canasta de cultivos que promete un crecimiento mayor al PIB agrícola.
- También, el estudio estructuró los encadenamientos e inclusión de pequeños agricultores que inspiren su labor por la promesa de mejorar la productividad, calidad y venta de su cosecha ante una empresa ancla compradora. Por ello, tenemos proyectos pilotos en la materia como el ‘Manejo Agronómico Disruptivo’, que materializa este esquema de trabajo.
- Por último, el estudio nunca dejó de insistir en una clave fundamental para mejorar la productividad: las Buenas Prácticas Agrícolas que, sin duda, apuntan a mejorar drásticamente la producción de las fincas. Por tal razón, los programas de Procultivos ANDI dedicados a mejorar la protección y nutrición de cultivos. CuidAgro y Mentes Fértiles, tienen resultados importantes por la metodología de trabajo con los adultos rurales, que desaprenden y reaprenden, mejorando su experiencia en el manejo integrado de sus cultivos.
No pretendo insinuar que Procultivos ANDI y sus afiliados somos la solución a los desafíos de nuestra agricultura, pero sí somos parte de esa respuesta. Sé que nuestros aportes, que venimos trabajando por años, podrán sumar a nuestros sueños; es por eso que me encanta esta frase de la Madre Teresa de Calcuta: “No podemos hacer grandes cosas, pero sí cosas pequeñas con un gran amor”. Y es lo que nos inspira todos los días: el amor por nuestro campo agrícola colombiano.
Gracias y nos vemos pronto.