El famoso viernes trece (ya el chistecito de repetir algo luego del trece podemos dejarlo de lado), mientras sonaba todo el ruido externo por la guerra, salieron datos macro en Colombia: las ventas al por menor aumentaron 11.4% y esperaban un 8.4%, o sea que bien. También salió la producción industrial, la cual bajó 4.8% y esperaban una bajada del 3.2%, o sea que mal. Convivimos entre cosas malas y buenas, entre gente chévere y jarta, entre climas calientes y fríos. Veía también que el petróleo se subía, tras ataque de Israel a Irán: por ejemplo, el WTI tocó los 77.6 dólares el barril, y hoy está volviendo a bajar a 72. Esta volatilidad se está dando en muchos activos. Varias cosas ocurrían, ad-portas del fin de semana del día del Padre, un día muy lindo en el que se buscó, y con todo éxito, enaltecer la labor del hombre papá. Los Tes habían bajado 3 puntos, unos más y unos menos. Así cerró todo, con todo el mundo esperando cómo seguía la guerra y cómo se mostraría la información en la presentación del Marco Fiscal el viernes en la tarde. Ya debieron haber visto las noticias, ya solo nos queda ver cómo reacciona hoy el mercado de dólar y de Tes ante lo anunciado por el Ministro y por el Director de Crédito Público. Yo puedo tener mi visión y creer tal cosa (mi optimismo en lo cíclico del mercado está siempre latente), pero ya veremos si lo que tengo en mi mente se materializa, eso lo sabrán mañana martes cuando vuelve a escribirles. Nothing lasts forever, even cold june rain. O como escribe Mary Wollstonecraft Shelley, the beginning is always today. Ig @kemistrye
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